Política | "Me molesta que me digan que tengo presos políticos porque no los tengo", afirmó el Presidente en el marco de la polémica originada en el seno de su gobierno por la detención de ex funcionarios kirchneristas.
El Presidente Alberto Fernández pidió "prudencia" en la discusión sobre la condición de exfuncionarios detenidos por presuntos hechos de corrupción y afirmó que, en la Argentina, no hay "nadie detenido sin causa a disposición del Poder Ejecutivo", condición necesaria para que alguien sea definido como "preso político".
El jefe de Estado dijo que, en parte, se trata de una "discusión semántica, que no es menor, porque el preso político es el preso sin causa que está a disposición del Poder Ejecutivo y yo no tengo a nadie sin causa; a mí me molesta porque no los tengo", declaró.
Por otra parte y respecto de su gira por Europa, el Presidente consideró que fue "mucho más que productiva" y resaltó que en todos los encuentros que mantuvo con los jefes políticos de Italia, España, Francia y Alemania recibió "una respuesta de apoyo, y eso fue muy importante".
Respecto del aborto, un tema que el propio Fernández volvió a colocar en la agenda, reiteró que "hay que despenalizar y legalizar el aborto", y advirtió que esa práctica "sea legal no significa que sea obligatoria".
Acerca de la posibilidad de avanzar con un proyecto de ley para terminar con el "negacionismo" de la última dictadura militar en Argentina, dijo que "no es una mala idea ponerle fin" y juzgó que negar los crímenes de lesa humanidad "es un acto vergonzoso" que genera un "enorme dolor" en el país.