Política y Economía | El Presidente destacó el "esfuerzo enorme" que hace la Argentina para que la oferta "también atienda el reclamo de los acreedores", y dijo que "el problema central" es que la deuda "se tomó muy rápidamente y se tiene que pagar en muy corto plazo".
Alberto Fernández, afirmó hoy que “todos queremos evitar el default" y que "la Argentina está haciendo un enorme esfuerzo tratando de hacer una oferta que atienda también el reclamo de los acreedores”.
En diálogo con Radio 10, Fernández dijo que quiere "ser optimista” con el tema de la deuda y que el objetivo es alcanzar un acuerdo que "no condicione a la Argentina" de cara al futuro.
"Yo quiero ser optimista. Todos queremos evitar el default. La Argentina está haciendo un esfuerzo enorme tratando de hacer una oferta que también atienda el reclamo de los acreedores”, señaló el Presidente.
Fernández señaló que "el problema central que tenemos es que es una deuda que se tomó muy rápidamente y que se tiene que pagar en muy corto plazo”, en referencia al exponencial crecimiento registrado entre 2016 y 2019. “La reestructuración de esta deuda es complejísima”, agregó.
Tras recordar que las conversaciones comenzaron hace dos meses, Fernández dijo que “ahora estamos tratado de hacer una nueva oferta, demostrando nuestra buena fe de acordar, con una oferta que se acerque un poco más a lo que piden los acreedores”.
El gobierno intentará cerrar en los próximos días, antes del vencimiento del plazo del 19 de junio, las negociaciones con los tenedores de bonos emitidos bajo legislación extranjera por US$ 66.700 millones.
De cara a ese objetivo, el Ministerio de Economía decidió mejorar la oferta de renegociación de la deuda sobre la base de las últimas recomendaciones del FMI y lleva adelante -bajo un esquema de confidencialidad que concluirán el martes- una ronda de intercambios con los acreedores para poder cerrar el proceso puesto en marcha formalmente el 17 de abril pasado.
Aunque no hubo mayores especificaciones, las mejoras de oferta incluyen dos años de gracia, una rebaja de intereses total de un poco menos de 62% y una quita de capital promedio de 5%.
"La oferta que vamos a hacer no va a poner en riesgo la sostenibilidad de la economía argentina", remarcó Fernández días después del respaldo a la iniciativa argentina del Fondo Monetario Internacional (FMI).
El organismo multilateral la calificó de "consistente" con el objetivo de sustentabilidad de la deuda, si bien consideró que había algún margen de mejora.
La semana pasada, al participar de un encuentro organizado por la CAF-Banco de Desarrollo, el premio Nobel de Economía Joseph Stiglitz volvió a apoyar la oferta del gobierno argentino para la reestructuración de la deuda externa y cargó contra los acreedores, a quienes acusó de ser "cortos de vista" y de resistirse "a acompañar los principios de sustentabilidad" en este proceso.
El viernes, al anunciar la decisión de extender una semana el plazo para negociar la deuda, el Palacio de Hacienda reveló que "la República continuó manteniendo proactivamente debates con distintos grupos de inversores, adelantó posibles ajustes a la invitación y recibió comentarios de inversores, así como también otras sugerencias sobre los diferentes caminos para mejorar los cobros".
En este sentido, agregó que "la República se encuentra analizando estas sugerencias para maximizar el apoyo de los inversores, al mismo tiempo que preserva sus objetivos de sostenibilidad de la deuda".
"Argentina cree firmemente que una reestructuración de deuda exitosa contribuirá a estabilizar la condición económica actual, mitigando las restricciones a mediano y largo plazo sobre la economía de Argentina", sostuvo la cartera que conduce Martín Guzmán.
En base a esta nueva extensión, salvo que se modifique nuevamente la fecha fijada, el anuncio de resultados será el lunes 22 de junio y la fecha de ejecución, la entrada en vigencia y fecha de liquidación será el 25 de junio.
Fuente: Télam.