"Tenemos que reconocer que no estamos bien"

"Lo primero que tenemos que hacer es reconocer que no estamos bien, como punto de partida. Espero que todos estemos a la altura de los desafios. Les traigo una hoja de ruta", dijo el Presidente. "Quiero ser claro del punto de partida, ya que venimos de años en los que el estado ha mentido sistemáticamente. Encontramos un Estado desordenado, faltan documentos, no hay estadísticas. En lso años que van del 2006 al 2015 los argentinos pagamos más impuestos por 6694 millones de dólares que en la década del 90, frente a eso encontramos un Estado con dificultades para reolver las necesidades. Más recursos no permitieron reducir los problemas de pobreza e infreastructura", agregó Mauricio Macri. "Hoy nos encontramos con un Estado con poca capacidad para cumplir sus obligaciones. Nos acotumbramos a vivir así, a que sea normal. Y no lo es. Este es un país en el que no puede haber un chico que se muera de hambre", siguió. "El 29 por ciento de la población está en la pobreza, el 42 por ciente carece de cloacas, el 13 no tiene agua corriente, y el 40 no tiene red de gas natural", enumeró. "El modelo de inclusión social y crecimiento que tanto habló el gobierno anterior nos llevó a la pobreza y la exclusión", resaltó. Afirmó que durante la anterior gestión "el Estado gastó más de lo que podía, emitió de manera irresponsable y generó inflación". Señaló que también se generó "uno de los mayores déficit de la historia" que estimó en "7 por ciento" del Producto Bruto. "Esto sucedió mientras vivíamos uno de los momentos de mayor presión tributaria de la historia", enfatizó el jefe de Estado ante la Asamblea Legislativa. Señaló también que se manejaron "recursos de manera unitaria y centralista como nunca antes en las últimas décadas". Cuestionó las medidas de seguridad del kirchnerismo y se quejó porque "entre las competencias y los traumas ideológicos casi todas las políticas de seguridad han sido un fracaso". "Por eso los argentinos tienen miedo. La inseguridad no es una sensación, es un flagelo que ha sido negado sistemáticamente y eso ha generado una violencia", recalcó el jefe de Estado. Criticó que "desde 2008 no se publican las cifras del delito". "Estamos en 3400 homicidios por año, lo que significa un aumento del 40% desde 2008", dijo. Aseguró hoy que la "Argentina es un país próspero para los narcotraficantes" y "exporta" drogas. "Según Naciones Unidas, la Argentina es el tercer país proveedor mundial de cocaína", destacó el mandatario nacional. "Nuestras fronteras están virtualmente indefensas, solo el 17 por ciento radarizadas". Dijo que "durante los últimos 4 años no creció el empleo en la Argentina" y "el Estado fue un obstáculo en lugar de ser estímulo". "Lo que sí aumentó fue el empelo público", señaló Macri, quien indicó que esa variable aumentó "64 por ciento" entre 2003 y 2015. Y subrayó: "encontramos un Estado plagado de clientelismo, de despilfarro y corrupción, que se puso al servicio de la militancia política y destruyó el valor de la carrera pública". "Podría seguir todo el día, pero por respeto a los argentinos que nos están mirando voy a cortar acá. Me comprometo a publicar todos los datos para que los argentinos sepan el estado en que se encontraba el país en 2015", afirmó. Pidió al Congreso "conseguir los consensos necesarios" para conseguir el paquete de leyes que definirá la salida del país del default, luego del acuerdo alcanzado ayer con los holdouts. Macri necesita la derogación de las leyes cerrojo y de pago soberano para afrontar la cancelación definitiva de la deuda por U$S 4653 millones. A las 11:49 le dio un corte a su primera parte del discurso. "Podría seguir todo el día, pero por respeto a quienes están siguiendo voy a cortar acá luego", dijo luego de 23 minutos en los que se dedicó sólo a hablar de la "herencia". Se comprometió a revelar "todos los datos desde 2003 hasta hoy". Entonces dijo que el diagnóstico "no debe servir para deprimirnos ni enojarnos". Allí comenzó la segunda parte del discurso del Presidente, planteado con referencias al futuro. "En estos casi 3 meses de gestión, trabajamos para normalizar nuestro país", apuntó. Cosechó aplausos -y también algunas interrupciones- cuando hizo alusión a la última dictadura. "Este año se cumplen 40 años del golpe militar, cuando se consolidó la época más oscura de nuestra historia. Aprovechemos este año para gritar todos juntos nunca más a la violencia", aseguró. Momentos de tensión se vivieron cuando prometió reducir la inflación y dijo que "la inflación la promovió el gobierno anterior". Su discurso fue interrumpido por legisladores del Frente para la Victoria y la vicepresidenta Gabriela Michetti tuvo que pedir "silencio para respetar al Presidente".