Política | Los Obispos de la región Litoral instaron a los legisladores a que "busquen aprobar leyes que ayuden a que toda mujer se sienta protegida y acompañada en su embarazo".
Los Obispos de la Región Litoral, reunidos en Paraná expresaron su firme convicción de que "cada niño que está viniendo a este mundo merece ser bienvenido, pues todo ser humano es un don, con su dignidad inviolable de ser persona, imagen de Dios". "Afirmamos y propiciamos una cultura de la inclusión, que no descarte a nadie por ninguna razón. Rechazar la vida que empezó su camino es signo de una cultura del descarte y la exclusión que nos deshumaniza, empobrece y contradice el dato duro de la ciencia.
El drama humano de una madre que se ve en el dilema de abortar a su hijo, implica diversos actores, pero nunca un problema humano se puede resolver eliminando a uno de ellos; siempre se debe solucionar procurando salvar a todos", dicen en un documento emitido en las últimas horas.
"Comprendemos la situación de muchas mujeres que frente a graves dificultades se ven tentadas de recurrir al aborto como solución. El aborto nunca es gratuito, deja huellas muy profundas, tanto a nivel biológico, psicológico como espiritual. Las animamos, a que con coraje, lleven adelante la vida de su hijo; al verlo nacer seguramente les traerá una gran alegría.
A las madres que hayan optado por el aborto les anunciamos nuevamente que la última palabra sobre la existencia humana es siempre la misericordia.
A los legisladores les animamos a que con inteligencia y sabiduría, respetando la verdad y el bien, busquen aprobar leyes que ayuden a que toda mujer se sienta protegida y acompañada en su embarazo. Así, en las leyes se mostrará que somos una sociedad fraterna, generosa e inclusiva", aseguran.
Más adelante a los fieles católicos los invitan a seguir "construyendo juntos la cultura de la vida y la inclusión, en primer lugar con la oración perseverante y confiada al Señor de la Vida. También los animamos a apoyar las distintas iniciativas a favor de la vida, que ya se realizan con gran esfuerzo, generosidad y valentía, que agradecemos profundamente, y a emprender nuevas obras que respondan a esta necesidad tan importante. De este modo, el testimonio de la caridad nos mostrará el Rostro misericordioso del Padre manifestado en Cristo Jesús".
La declaración lleva las firmas de los Arzobispos José María Arancedo (Santa Fe de la Vera Cruz), Juan Alberto Puiggari (Paraná), cardenal Estanilao Esteban Karlic (emérito de Paraná) y Eduardo Eliseo Martín (Rosario), y de los obispos Luis Fernández (Rafaela), Luis Collazuol (Concordia), Héctor Zordán (Gualeguaychú), Gustavo Help (Venado Tuerto), Hugo Santiago (San Nicolás de los Arroyos) y Ricardo Faifer (emérito de Goya).