Política | Javier Milei y su par de Italia, Giorgia Meloni, anunciaron tras la reunión bilateral que mantuvieron este miércoles en la Casa Rosada un plan de acción conjunto entre ambos países para trabajar entre 2025 y 2030 con el objetivo de "identificar los sectores principales para la colaboración bilateral en los cuales se podrán concentrar esfuerzos".
El acuerdo de colaboración fue anunciado por la Presidente del Consejo de Ministros de Italia durante una conferencia conjunta en el Salón Blanco. Allí, Meloni aseguró que "Italia y Argentina tienen mucho camino por recorrer juntos" y enfatizó: "estoy feliz de recorrer este tramo de camino junto a Javier (Milei), un hombre valiente, mi amigo y un amigo de Italia".
Por su parte, el libertario abrió la conferencia dándole la bienvenida a Meloni, a quien le aseguró que "está en familia" y "esta es su casa", ya que "el siglo XX convirtió a los italianos y los argentinos en pueblos hermanos, con un linaje común y lazos de sangre profundos que datan de varias generaciones".
La jefa de Estado europea enfatizó que "Italia y Argentina tienen un gran potencial para explorar" y explicó los detalles del plan de acción bilateral entre ambos países. La primera pata del acuerdo es "la colaboración política".
En ese sentido, Meloni destacó las coincidencias en común con Milei respecto a "Ucrania, Medio Oriente y la crisis que está atravesando Venezuela".
La mandataria se aferró al pasaje sobre política internacional y ratificó que su gestión "condena la represión del régimen de (Nicolás) Maduro que llevó a la muerte de decenas de manifestantes, a la detención de miles de opositores y al exilio del candidato de la oposición democrática ¡(Edmundo González Urrutia)".
"Es nuestro deber hacer escuchar nuestra voz y le agradezco al presidente Milei por hacerlo en varias oportunidades", subrayó Meloni. En segundo lugar, la jefa de Estado mencionó la necesidad de avanzar en "la lucha contra la criminalidad organizada", que incluye el combate contra "el narcotráfico, la corrupción, el lavado de dinero, la infiltración del sistema económico y social y la trata de personas".
Por último, adelantó que su Gobierno busca "relanzar la cuestión comercial y de inversiones" en Argentina. "El potencial de crecimiento es extraordinario. Gracias a esto, 300 empresas italianas que tienen 16 mil empleados, con casi 3 mil millones de euros de giro de negocios están en Argentina", puntualizó.
En ese sentido, Meloni sostuvo que "las políticas de liberalización de mercado para apoyar las inversiones que el presidente Milei está llevando adelante pueden abrir nuevas oportunidades y ser un incentivo para que crezca la presencia italiana", sobre todo en sectores estratégicos como "la transición energética, la infraestructura, el suministro de materias primas críticas y el transporte aéreo y aeroespacial".
Milei remarcó que la relación entre Argentina e Italia "fue ambivalente durante estos últimos 200 años". En contraposición, señaló que "hoy se encuentran dos administraciones afines, que reconocen desafíos comunes".
"Tenemos la oportunidad histórica de estrechar nuestros lazos para construir una relación especial entre nuestras naciones", aseguró Milei. El mandatario argumentó que esa relación no se debe solo por "los vínculos pasados o cultura en común", sino también por "los valores compartidos, que hoy lamentablemente escasean en el mundo occidental".
En esa línea, como lo hizo durante la Cumbre de líderes del G20, Milei apuntó contra el "sinsentido económico y los avances sobre los derechos de propiedad", a los que opuso "la defensa del comercio libre, la sensatez y la propiedad privada a rajatabla".
"Frente a la ideología de género tan de moda en occidente en la última década, abogamos por el respeto irrestricto del derecho a la vida y la defensa de la familia como el elemento central de nuestra sociedad", continuó el libertario, y agregó: "ante la enfermedad del alma que es el virus woke, nosotros pedimos restaurar el sentido común y volver a los valores que comparten la gran mayoría de los ciudadanos del mundo occidental, que en buena medida fueron forjados en la antigua Roma".
Además, el argentino destacó las características comunes que lo unen con Meloni y afirmó que "los dos fueron elegidos para conducir los destinos de sus países y abordar con coraje, verdad y sin tapujos los problemas centrales de sus naciones".
"En nuestro caso, terminar con la inflación rampante y la miseria profunda que dejaron en Argentina décadas de colectivismo. En el caso de la primera ministra Meloni, darle una respuesta contundente al problema de la inmigración descontrolada y sus consecuencias sobre la seguridad ciudadana", explicó.
A su vez, el presidente añadió que ambos saben que hacer eso "no es gratuito", ya que provoca el "castigo del establishment, que prefiere administrar la decadencia a construir las soluciones". Sin embargo, confió en el triunfo de "las Fuerzas del Cielo" y enfatizó: "Estoy entusiasmado por el futuro de colaboración que le espera a nuestras naciones".