López confesó que los bolsos del convento eran de CFK
Judiciales | El ex funcionario K declaró ante Bonadio y Stornelli que los bolsos que dejó en un convento en 2016 pertenecían a la ex Presidente.
La ex Presidenta Cristina Fernández de Kirchner ve más complicada su situación judicial, a raíz de las nuevas declaraciones del ex Secretario de Obras Públicas José Francisco López quien confesó que los famosos bolsos con más de 9 millones de dólares que intentó ocultar en un convento en 2016 pertenecían a la actual senadora.
López lanzó esa confesión ante el Juez Claudio Bonadio y el Fiscal Carlos Stornelli, quienes investigan el entramado de sobornos montados por el matrimonio de Néstor Kirchner y Cristina Fernández durante sus gobiernos entre 2003 y 2015 y que involucra a una gran cantidad de ex funcionarios y empresarios hoy detenidos o imputados, muchos de ellos bajo la figura de "arrepentido".
El otrora poderoso señaló además al ex Secretario privado de Fernández de Kirchner, Fabián Gutiérrez, como el intermediario que le trasmitió la orden de su 'jefa' para que escondiera los bolsos con dinero.
De hecho se sabe que Gutiérrez fue una de las personas que estuvo más cerca de CFK hasta el último día de su gestión en diciembre del 2015, y nunca dejó de ser el hombre de extrema confianza de la ex presidenta incluso después de renunciar formalmente a su cargo al ser investigado por la Justicia debido al extraordinario crecimiento del 700% de su patrimonio durante los gobiernos kirchneristas.
Según la declaración de López reconstruida por el diario porteño La Nación, Gutiérrez se reunió con López el 13 de junio de 2016 en el Hotel City, ubicado en el microcentro de la ciudad de Buenos Aires, para decirle que había que "mover una plata" que le sería entregada esa misma noche. La encomienda le fue entregada en su casa, y además de los 9 millones de dólares habían numerosas joyas como relojes, gemelos, collares, anillos, aros y pulseras, todas pertenecientes a Cristina que había dado la orden de esconderlas.
Desconcertado, el ex Secretario de Obras Públicas recordó la existencia del convento de las 'no monjas' ubicado en el partido bonaerense de General Rodríguez que había recibido 'generosas' partidas de dinero en manos del ex ministro Julio De Vido y él mismo.
Luego la historia es públicamente conocida: López llegó al convento y fue atendido por una de las 'monjas', pero una llamada al 911 advirtió sobre su sospechosa presencia y fue posteriormente detenido en ese mismo lugar.
Durante mucho tiempo, López sostuvo que el dinero de los bolsos provenía "de la política", pero se negaba a dar nombres. Tras el estallido mediático por los cuadernos del ex chofer Oscar Centeno, que lo involucraba como receptor de los sobornos que pagaban los empresarios de obras públicas a través del entonces Subsecretario de Coordinación y Control de Gestión del Ministerio de Planificación, Roberto Baratta, López fue puesto otra vez bajo indagatoria, pero su miedo era evidente y tenía ataques de pánico. Fue en ese momento cuando López pidió ser un imputado protegido por la Justicia y no volver más al penal de Ezeiza. La Justicia accedió a su pedido y ahora el ex funcionario está en un lugar que nadie conoce.