Economía | La contracción, medida por el INDEC, se explicaría no sólo por la turbulencia cambiaria, sino también por la sequía.
Según informó el INDEC la economía se contrajo un 5,8% anual en mayo, y anotó también de esta manera el peor registro desde que Mauricio Macri asumió la Presidencia. La serie histórica indica que la baja fue la más negativa desde julio de 2009.
Para tamaña caída fue determinante el impacto de la sequía en la agricultura (responsable de un tercio de las exportaciones totales de la Argentina), que registró su peor performance en 107 meses, desde junio de 2009.
Estos datos fueron revelados en el informe sobre el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) que el INDEC publicó ayer. En el mismo se lee que la actividad bajó 1,4% respecto de abril.
El registro de mayo ralentizó al 0,6% el crecimiento que venía acumulando la actividad, que había crecido 4% en enero; aceleró al 5% en febrero; anotó 2,1% en marzo; y mostró una baja del 0,6% en abril.
Según un informe difundido ayer por el Ministerio de Producción, la actividad económica del país cayó en abril último por primera vez en trece meses, producto de “la peor sequía en 50 años, el shock externo y la volatilidad cambiaria”.
Mayo fue el segundo mes consecutivo de caída de la economía. Esta situación coincidió con el inicio de la crisis cambiaria que generó una fuerte devaluación del peso y un aumento de la incertidumbre de inversores y consumidores.
El jefe de Gabinete, Marcos Peña, había advertido horas antes de conocerse el EMAE que “los próximos meses van a ser un poco más fríos, un poco más tormentosos”, al referirse a las consecuencias de la crisis económica que afecta al país.
Si bien aún no hay datos oficiales sobre junio, las consultoras ya comenzaron a mostrar sus mediciones. Según la consultora de Orlando Ferreres, la industria se contrajo un 5% interanual en junio, por lo que acumuló en el primer semestre una merma de 0,2% anual.
Durante el mes de junio, la industria manufacturera fue afectada por bruscas caídas en los sectores más relevantes. El segmento de Alimentos y Bebidas se registró una contracción del 6,8% interanual, un retroceso de 14,1% en la producción de aceites, y una baja de 8% en las bebidas.
El fuerte impacto de la sequía determinó que el sector de “Agricultura, ganadería, caza y silvicultura” se contrajera un 35,2% anual, el peor resultado desde junio de 2009.
Por entonces, la Argentina enfrentaba los coletazos del colapso financiero internacional que se inició en 2007 en los Estados Unidos.