Impulsan proyecto que penaliza la corrupción empresaria
Política | El interbloque Cambiemos logró avanzar en Diputados con el proyecto que impone penas a las personas jurídicas que cometan actos de corrupción. Rechazo total del FpV-PJ y de la izquierda.
La futura ley apunta a sancionar los delitos contra la administración pública cometidos por empresas de capital nacional o extranjero, para cumplir con una exigencia de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos).
Si bien la Cámara baja había incluido todos los ilícitos, el Senado devolvió al texto su espíritu original, y sólo se penalizarán los delitos de cohecho, negociaciones incompatibles con la función pública, tráfico de influencias nacional o trasnacional, concusión, enriquecimiento ilícito y falsificación de balances.
En nombre del Frente Renovador-UNA, Juan Brugge adelantó que el bloque acompañará la votación en general, pero planteó objeciones sobre la prescripción de los delitos abarcados en el proyecto y el cálculo del monto de la sanción.
Sobre el primer punto, el proyecto aprobado en Diputados fijaba la imprescriptibilidad de los ilícitos, pero el Senado estableció un plazo de seis años. “Lamentamos que no hayan igualado los delitos de corrupción con los de lesa humanidad, porque es la propia Constitución la que los equipara”, consideró Brugge.
En segundo término, cuestionó que el monto de la sanción para las empresas se calcule sobre la ganancia obtenida indebidamente -lo que, consideró, será “difícil” de estimar- y no sobre la base de los balances -como se indicaba inicialmente-.
Según el proyecto dictaminado, las multas van de dos a cinco veces el beneficio obtenido de manera ilícita; la suspensión total o parcial de actividades -con un máximo de diez años-; la prohibición por diez años de participar en concursos o licitaciones estatales; y la disolución de la personería gremial cuando hubiese sido creada al solo efecto de delinquir, entre otras sanciones.
El Frente para la Victoria-PJ definirá en las próximas horas si acompaña o no el proyecto en el recinto, según anunció el Diputado Rodolfo Tailhade, quien aclaró además que la mayoría de su bloque no firmaría dictamen alguno, publicó Parlamentario.
Tailhade señaló que el artículo 9, referido a las tres condiciones para conseguir la eximición de la pena, implica “una válvula de escape al sistema de responsabilidad penal”.
En este sentido, el texto dice que la empresa puede eximirse de la pena si es ésta misma -y no el Estado- la que detecta el delito; si implementa un sistema de control y supervisión adecuado (programas de integridad o “compliance”); y si devuelve el beneficio obtenido de forma ilegal.
El kirchnerismo también se expresó en contra de los “acuerdos de colaboración eficaz”, donde la persona jurídica podrá comprometerse ante el Ministerio Público Fiscal a colaborar y brindar “datos precisos, útiles y comprobables para el esclarecimiento de los hechos, la identificación de sus autores o partícipes, o el recupero del producto de las ganancias del delito”, a cambio de la reducción de la pena.
Por la izquierda, Pablo López (Partido Obrero) advirtió que “los salvoconductos de las empresas para zafar de su responsabilidad siguen existiendo” a pesar de los cambios impuestos en el Senado, y adelantó la firma de un dictamen de rechazo.