Política | El sábado 4 de agosto, las iglesias evangélicas se concentrarán en derredor del Obelisco porteño para manifestarse "unidos en la defensa de las dos vidas".
El sábado 4 de agosto vamos #TodosAlObelisco para proclamar a una sola voz #SalvemosLas2Vidas", lanzaron las Iglesias Evangélicas "unidas en la defensa de la dos vidas".
Los impulsores de la concentración espera decenas de miles de creyentes que ya se comprometieron con llegar a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires en cientos de micros provenientes de distintos puntos del país para reclamar por la no aprobación de la ley de interrupción de embarazo.
La convocatoria tiene un carácter federal con un mismo mensaje "Salvemos las dos vidas". Se invocará la protección de Dios Fuente de toda Razón y Justicia en favor del niño por nacer y las madres que los llevan en su vientre. El punto central será solicitarles a los senadores de la Nación que se expidan el próximo 8 de agosto en contra del proyecto de ley de despenalización del aborto.
Es importante destacar también el trabajo conjunto con la iglesia católica y grupos próvida en varias acciones y movilizaciones desde que el proyecto de ley comenzó a debatirse en la Cámara de Diputados. Prueba de ello fueron los testimonios de la Conferencia Episcopal Argentina al compartir los conceptos sobre declaraciones vertidas por ACIERA" en el documento "Derecho a la Vida", señaló el Pastor Rubén Proietti, titular de la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina.
La magna movilización surge luego de un encuentro histórico que se sucediera el pasado 5 de julio pasado en las instalaciones de la Iglesia Visión de Futuro, donde por unanimidad referentes nacionales evangélicos en favor de las dos vidas elaboraron una declaración en contra del proyecto de ley que se debate en el senado, al señalar que en su mayoría la práctica del aborto es producto de embarazos no deseados "consecuencia de una conducta sexual irresponsable".
Los organizadores, afirmaron en su declaración que "la práctica de abortos clandestinos, más allá de cuántos sean, es en sí misma un problema humanitario y de la sociedad actual, cuyas secuelas son profundas y difíciles de sobrellevar".
"Entendemos que la salud pública debe encontrar propuestas que cuiden y protejan a la madre y el niño por nacer, defendiendo la vida de ambos", sostuvieron y agregaron que su posición "sobre cuándo comienza la vida" se apoya en "fundamentos científicos, racionales y éticos, siendo el valor supremo de la vida, desde la concepción, hasta su muerte natural".
También el miércoles 8 las iglesias evangélicas por las dos vidas y en forma conjunta con los grupos providas y parroquias católicas, se concentrarán en el Congreso de la Nación desde las 13 horas en un festival por la vida, el día de la votación en el Senado de la Nación.