Política y Economía | Nicolás Pino, presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), inauguró este sábado la 134 edición de la tradicional muestra de La Rural de Palermo con un fuerte discurso político contra el Gobierno Nacional y criticando las retenciones que se les aplican productores.
"Hace unos días nos acusaron de especuladores y ese rol lo tiene el Estado", afirmó Nicolás Pino, titular de la Sociedad Rural, encabezó la inauguración oficial de la Exposición en Palermo.
“Dilapidaron el dinero en subsidios en vez de potenciar el trabajo”, cuestionó. En un acto sin presencia de referentes del Gobierno, Pino dijo que "es en este lugar y en estos días, cuando mostramos de manera contundente, la enorme importancia que tenemos, al aportar, todos juntos, al sostenimiento y desarrollo de la Patria".
Destacó que el sector agroindustrial "genera más de un tercio de toda la fuerza laboral del país: desde los emprendedores y los trabajadores que realizan la enorme variedad de tareas de producción y elaboración de los frutos del campo, hasta la red de científicos, técnicos, comercializadores y transportistas, que sostienen día tras día el trabajo productivo".
"Somos 227 mil productores, y existen 25 mil establecimientos y empresas que transforman lo que produce el campo", puntualizó. Consideró que el Estado argentino está "obligado, como prioridad, a darles a todos los ciudadanos los servicios de seguridad, salud, educación, justicia, moneda fuerte e infraestructura".
Y enfatizó que "es el campo, en este momento, el que más contribuye a que el Estado pueda cumplir con esa función".
Pino dijo que durante el primer semestre de este año, ingresaron, desde el sector agroindustrial, a las arcas del Banco Central, "más de 19.000 millones de dólares. Resulta un récord absoluto y supera a la media histórica en un 90 por ciento".
Pino recordó que el gobierno "intervino en las exportaciones de carne, provocando que cayeran un 11 por ciento en el último año".
Pero señaló que "paradójicamente, y bajo el pretexto de proteger con precios bajos el consumo de la población, lo que consiguieron fue hacer subir esos precios, impulsados por la falta de soluciones verdaderas para erradicar la inflación creciente que afecta a todos los argentinos".
"El resultado está a la vista: el consumo de carne bovina en Argentina ha caído a un piso histórico. Un reflejo directo del deterioro del salario", subrayó.
Dijo que en tanto, se mantienen las retenciones, disminuye el número de productores. Reveló que "en el censo de 2001 se registraron 297 mil productores; hoy somos 227 mil, 70 mil productores han sido echados del campo, 70 mil familias sin el sustento y el arraigo que el campo les proporcionaba, y en peligro de engrosar el número de los pobres y marginados".
Dijo que la crisis provocada por la falta de gasoil "afecta a todos los procesos productivos: entre otros, el de los limones, en Tucumán y Corrientes, cuyos productores no pudieron transportar la cosecha, y el del azúcar, en el noroeste, cuya zafra se vio retrasada en el momento crítico: el transporte de la caña al ingenio azucarero".
"¿Por qué falta gasoil?", se pregunto. Dijo que es "porque el Estado controla su precio, creyendo poder usarlo como un ancla contra la inflación, en vez de tomar medidas efectivas contra ella".
"No hay diferencia entre productores pequeños, medianos o grandes; no hay diferencia entre patagónicos, norteños, litoraleños, cordobeses, pampeanos o puntanos. Nuestros valores son los mismos: la justicia, el trabajo honrado, el respeto por la propiedad privada, la legitimidad del lucro y la libertad de tomar decisiones económicas. Lo que le sucede a uno de nosotros, nos sucede a todos", afirmó el dirigente.
Nicolás Pino lanzó una frase que pareció dirigida a la ex Presidente, Cristina Kirchner. "Ya sabemos lo que no funciona: no funciona el revoleo de bolsos llenos de dólares, ni el recuento de pilas de billetes mal habidos", disparó en medio de aplausos y pidió: "basta de robarle a la gente su dignidad".
En contraposición con las críticas del Ejecutivo, aseguró que "el campo está de pie" y que el sector produce, no hace promesas. El dirigente admitió entre risas que debieron cambiar seis veces el discurso inaugural por las idas y vueltas con los cambios en el Gobierno, calificó de "ilegales e inconstitucionales" a las retenciones a las exportaciones del agro. Sobre el nuevo Gabinete, insistió que Agricultura debe "seguir manteniendo el rango ministerial".