Salud | Se trata de la desarrollada por el laboratorio Pfizer y la compañía alemana BioNTech. Si bien hay más de 15.000 anotados para sumarse, del estudio participarán 4.500 personas de entre 18 y 85 años.
La inoculación de los pacientes se extenderá durante varios días, dependiendo de la cita que la persona tenga para acudir al Hospital Militar Central "Cosme Argerich", en la Ciudad de Buenos Aires.
En la primera visita al hospital, se les hará diferentes testeos médicos y un hisopado para verificar que no tengan coronavirus. “La idea es vacunar al voluntario con la primera dosis ese mismo día siempre que se pueda, aunque es algo que van a decidir los investigadores teniendo en cuenta parámetros médicos”, explicó Sergio Maldonado, director del hospital, en diálogo con Clarín.
La segunda dosis será aplicada 21 días más tarde. “Habrá un grupo que recibirá la vacuna y otro, un placebo”, precisó Maldonado, sobre el estudio de fase 3 (la última etapa previa a la aprobación, en caso de resultar eficaz). Como se firmó un convenio por 30 meses, durante ese lapso se realizará un seguimiento clínico de los voluntarios para evaluar los efectos de la vacuna.
Unos 400 empleados del Hospital Militar Central, entre médicos, enfermeros y personal administrativo, fueron capacitados para las pruebas. “Habrá una app destinada a monitorear a los que participen del estudios y, además, los pacientes tendrán chequeos presenciales”, añadió el Director del hospital sobre la investigación, que tendrá a cargo a nivel local al infectólogo Fernando Polack.
Polack, investigador principal del estudio y líder del equipo de médicos, investigadores y expertos en logística de estudios clínicos que llevaran adelante las pruebas, manifestó en una entrevista con Télam en julio último que apuestan a “tener respuestas sobre su efectividad a fin de este año” y destacó que “ser parte de estos ensayos posiciona al país en lugar de privilegio para la distribución”.