Política y Economía | El Ministerio de Economía solicitará autorización a la Comisión de Bolsas y Valores de los Estados Unidos (SEC) para realizar una oferta de un primer tramo de la deuda pública en reestructuración emitida bajo ley extranjera, por 30.500 millones de dólares, se informó este lunes.
La medida fue anunciada en el Boletín Oficial, en el marco del plan que lleva adelante el gobierno del peronista Alberto Fernández para recuperar la sostenibilidad de la deuda, para poder afrontar su pago sin agravar la recesión económica que vive Argentina desde hace casi dos años.
El programa aspira a reestructurar bonospor un máximo de 68.842 millones de dólares emitidos bajo legislación extranjera, existentes al 12 de febrero pasado. Se preveía la presentación de la oferta a los acreedores la semana pasada, pero el gobierno decidió demorar el proceso en medio de la crisis por el coronavirus.
El monto global a registrar ante la SEC será tramitado en cifras parciales que se definan en el marco de la negociación en curso, según detalla la resolución publicada en el Boletín Oficial, "resultando oportuno y razonable una primera registración de 30.500 millones de dólares, atendiendo a las características de las escrituras de 2005 y 2016".
Según cifras de la Secretaría de Finanzas, a finales de diciembre pasado la deuda bruta de Argentina ascendía a 323.177 millones de dólares, el 44% emitido bajo legislación extranjera, mientras que en 2015 era de 240.000 millones de dólares, según el anterior Ejecutivo.
La deuda en títulos públicos de mediano y largo plazo suma unos 194.000 millones de dólares, un 80 % en moneda extranjera, al tiempo que la concentración de vencimientos en el corto plazo genera alerta en el gobierno, porque deberá afrontar compromisos de capital por 48.968 millones de dólares y de intereses por 14.838 millones.
El temor a una crisis mundial por la pandemia de coronavirus golpeó de nuevo este lunes al índice líder Merval de la Bolsa de Buenos Aires que se derrumbó 9,67%.
Otra nerviosa jornada bursátil derumbó sin tregua al indicador principal hasta que cerró en 25.697,51 puntos. La semana pasada la baja acumulada en el panel líder rozó el 25%.
"La caída fue en respuesta a los temores sobre el impacto en la economía global que tendrá la pandemia del coronavirus que golpea al mundo", dijo el portal especializado ambito.com al citar la opinión unánime de los operadores.