| Tras el escándalo por el ingreso al país de un venezolano con una valija repleta de dólares no declarados, cayó ayer el primer funcionario del gobierno de Hugo Chávez.
El vicepresidente de la empresa estatal petrolera PDVSA, Diego Uzcategui Matheus, señalado como el hombre que pidió que el empresario Alejandro Antonini Wilson subiera al avión que aterrizó en el Aeroparque, puso a disposición del gobierno su cargo para que puedan investigarlo.
La renuncia, aún no formalizada, fue anunciada por la prensa venezolana y confirmada por fuentes gubernamentales locales, aunque el gobierno de Hugo Chávez no lo difundió oficialmente.
Desde que estalló el escándalo, el gobierno argentino exigía a Chávez la remoción del vicepresidente de la compañía. El Gobierno acusa a ese directivo de haberle pedido al ex titular del Occovi, Claudio Uberti, que llevara a “cinco directivos de PDVSA”, dos de los cuales terminaron metiendo en serios problemas al gobierno argentino.
Es cierto que había tres directivos reales de la petrolera. Pero dos no lo eran y ello indignó, en teoría, a Balcarce 50. Estos eran Daniel Uzcateguy Speech, hijo del vicepresidente de PDVSA, y su acompañante Antonini, el Valijero.
Esta es la primera medida del gobierno de Chávez frente al escándalo que salpicó de lleno al gobierno de Néstor Kirchner y que provocó las críticas de todo el arco opositor, el avance de una investigación judicial, y el desplazamiento del gobierno de Uberti, mano derecha del ministro de Planificación Julio De Vido, y encargado en las sombras de la relación con Venezuela.
El gobierno de Kirchner había recibido con cierto malestar y resignación la falta de respuesta de la administración de Chávez, que había rechazado el reclamo argentino de dar explicaciones, pedir disculpas y hacer gestos elocuentes para descomprimir la presión por el escándalo de la valija de 800.000 dólares sin declarar que llegó a la Argentina.
El martes, el presidente de la petrolera venezolana PDVSA y ministro de Energía, Rafael Ramírez, había asegurado que PDVSA no tiene “ningún tipo de relación” con Antonini Wilson, el empresario venezolano que llevaba la sospechosa valija.