| La tortuga "Tzvika" fue atropellado por una cortadora de pasto. Veterinarios de Israel lograron salvarla, pero para que pueda desplazarse le colocaron ruedas.
Un tiempo atrás en la ciudad del riel había un perrito con un dispositivo similar.
Una tortuga pudo volver a caminar, luego de que un veterinario le implantara una suerte de silla de ruedas a su caparazón. El animal pudo desplazarse sin problemas en una clara señal de que la mano del hombre no sólo destruye la naturaleza.
Tzvika es el nombre del animal, que fue atropellado por una cortadora de pasto hace dos meses. La lesión le dañó su caparazón y perdió la movilidad en sus patas traseras.
Afortunadamente, un veterinario del Hospital de la Vida Silvestre en el Safari de Ramat Gan, cerca de Tel Aviv, tuvo la idea de pegarle un par de ruedas en su parte inferior . Aunque en un principio la tortuga rechazaba el implante, luego de unas horas comenzó a moverse.
Como seguramente muchos basavilbasenses recordarán una mascota de Humberto Sosa, propietario del hotel "Robertito" de nuestra ciudad, con problemas óseos y musculares en los cuartos traseros quedó postrado hasta se le hizo un "carrito" con dos ruedas que le permitieron desplazarse por años sin mayores inconvenientes.