Sociedad | Un fuerte tornado sacudió el municipio de Rio Bonito do Iguaçu, en el estado brasileño de Paraná, dejando al menos cinco personas muertas y más de 130 heridas, según lo informado por las autoridades.
El desastre se concentró principalmente en zonas residenciales del municipio, donde varias edificaciones colapsaron, autos fueron volcados y hasta el 80 % de las construcciones de pequeños asentamientos rurales resultaron dañadas.
En su comunicado, la Defensa Civil indicó que mientras unos 30 heridos se encuentran en estado moderado a grave, más de 100 presentaron lesiones leves. Ante la emergencia, el gobierno nacional movilizó equipos de ayuda humanitaria y desplegó operativos de rescate.
El ministro de Integración y Desarrollo Regional, Waldez Góes, confirmó la coordinación de la respuesta por orden del presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
También el Gobernador local, Ratinho Júnior, aseguró que fuerzas de seguridad del estado permanecen movilizadas, monitoreando la zona y acompañando la atención a las familias afectadas.
El desastre dejó también amplios sectores sin electricidad y comunicaciones, lo que complicó la llegada de socorristas y acentuó el aislamiento de comunidades rurales.
El Instituto Nacional de Meteorología de Brasil mantuvo vigente una alerta de “peligro por tormentas” para Paraná y los estados limítrofes de Santa Catarina y Rio Grande do Sul, advirtiendo sobre eventuales fenómenos similares.