Martes 10 de Junio de 2014, 15:08

Reuven Rivlin es el nuevo presidente de Israel

| Ganó este martes en la segunda vuelta realizada en el Parlamento y será quien reemplace al centro derechista Shimon Peres.

En una apretada votación en el Kneset (Parlamento), en la que fueron necesarias dos vueltas para alcanzar la mayoría absoluta de 60, Rivlin obtuvo 63 sufragios contra los 44 logrados en la primera ronda. Su rival más cercano, el centrista Meir Shitrit, fue apoyado inicialmente por 31 parlamentarios y en la segunda ronda sumó 53 votos. En la segunda votación, una de las más tensas que se recuerdan en el país, participaron 119 de los 120 diputados debido a que el único ausente se encuentra en el extranjero. "Ha sido más dramático de lo que esperábamos, pero al final ha ganado Rivlin", dijo el ministro de Transporte, Israel Katz, que defendía la candidatura de su colega de partido. Abogado de profesión, el electo décimo presidente de Israel es considerado como un político desconcertante, dado que se identifica con la derecha nacionalista más radical y a la vez defiende a capa y espada, al menos públicamente, los valores democráticos. Rivlin, de 74 años y defensor de la ideología del Gran Israel, es un veterano político del partido gobernante Likud, que dirige el primer ministro, Benjamín Netanyahu, con quien, sin embargo, está enemistado desde 2009, aparentemente por razones personales. De hecho, éste último le dio su apoyo únicamente a fines de mayo y este martes, después de conocer los resultados, ni siquiera se levantó a felicitarlo. En la primera vuelta de la elección habían participado cinco candidatos: tres políticos, la ex jueza suprema Dalia Dorner y el premio Nobel de Química Dan Shechtman. Rivlin, con 44 votos, y Shitrit, con 31, pasaron a la segunda y definitiva elección en medio de fuertes especulaciones acerca de que el candidato conservador se vería sorprendido por el más joven político de centro, lo que al final no ocurrió. El nuevo presidente israelí, que sólo tiene funciones protocolarias, sucederá el próximo 24 de julio a Peres, un líder que fue primer ministro dos veces (1984-1986 y 1995-1996) y recibió el premio Nobel de la Paz (1994). Aunque en reiteradas oportunidades Peres ha declarado su apoyo a la creación de un estado palestino, lo cierto es que durante el mandato de Netanyahu defendió sus políticas, que incluyen la expansión de los asentamientos judíos en territorios palestinos. Convertido en una suerte de Canciller de Israel, el último acto al que asistió como presidente de Israel fue en el Vaticano, donde rezó una "oración por la paz" en Medio Oriente junto con su colega palestino y el Papa Francisco.