El Papa Francisco encabezó este domingo el Ángelus ante la llegada de la Navidad e instó a las autoridades del mundo a "hacer todo lo posible para que toda familia tenga una casa".
El Sumo Pontífice divisó un cartel entre los peregrinos que seguían de cerca su mensaje ante la celebración navideña y lo resaltó para luego hacer propia esa frase: "Los pobres no pueden esperar".
"Es muy difícil mantener una familia sin poder tener una casa. Por eso, en este día de nacimiento invito a todas las personas, entidades sociales, autoridades, a hacer todo lo posible para que toda familia tenga una casa. Casa y familia van de la mano", sostuvo Francisco en la misa que encabezó desde el balcón del Vaticano.