| La próxima Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) se celebrará en 2016 en la ciudad polaca de Cracovia, anunció el papa Francisco al cerrar en Río de Janeiro la edición de 2013 de la cita, que, según la Alcaldía de la ciudad brasileña, reunió en la playa de Copacabana a más de tres millones de fieles.
Así, la JMJ vuelve tras 25 años a Polonia, tierra del difunto papa Juan Pablo II, quien está en camino a ser declarado santo y creador de las jornadas.
Cracovia es la ciudad de la que el beato papa Juan Pablo II fue arzobispo desde 1962 y cardenal desde 1967 hasta el 16 de octubre de 1987, cuando fue elegido pontífice tras la muerte de Juan Pablo I.
La Jornada Mundial de la Juventud se creó en 1984, cuando tras concluir el Año Santo de la Redención, Juan Pablo II entregó una cruz de madera de cuatro metros de alta a los jóvenes invitándoles a llevarla por todo el mundo.
Desde entonces se han celebrado en Roma (1985), Buenos Aires (1987), Santiago de Compostela (España) en 1989; Czestochowa (Polonia) en 1991; Dénver (Colorado, Estados Unidos) en 1993; Manila en 1995, París en 1997; Roma de nuevo durante el Jubileo 2000, y Toronto (Canadá) en 2002.
En Colonia (Alemania) se celebró en 2005, en Sidney (Australia) en 2008; en Madrid en 2011 y en Río de Janeiro en 2013.
Hasta la JMJ de Toronto, los encuentros se celebraban cada dos años, A partir de Colonia se han celebrado cada tres años y tras Madrid volvió de a los dos años de diferencia debido a que en 2014 se celebrará en Río de Janeiro el Mundial de Fútbol y para no hacer coincidir los dos eventos.
Entre los encuentro mundiales, todos los años se celebran estas Jornadas a nivel diocesano en cada país.
"Queridos jóvenes, tenemos una cita en la próxima Jornada Mundial de la Juventud en 2016 en Cracovia, Polonia. Pidamos, por la intercesión materna de María, la luz del Espíritu Santo para el camino que nos llevará a esta nueva etapa de gozosa celebración de la fe y del amor de Cristo", dijo el pontífice, al terminar el rezo del Ángelus, durante el cual agradeció el éxito de la JMJ.
Durante el rezo, Francisco reiteró el llamado a los jóvenes católicos para que participen activamente en los esfuerzos de evangelización y cumplan el lema de la cita carioca de "hacer discípulos a todos los pueblos".
"En estos días, Jesús les repite con insistencia la invitación a ser sus discípulos misioneros", afirmó Francisco, quien instó a los jóvenes católicos a no tener miedo de evangelizar.
"¡Vale la pena! Salgan y vayan con valentía y generosidad, para que todos los hombres y mujeres encuentren al Señor".
"¿No es verdad que, en esta voz que ha resonado en sus corazones, han sentido la ternura del amor de Dios? ¿Han percibido la belleza de seguir a Cristo, juntos, en la Iglesia? ¿Han comprendido mejor que el evangelio es la respuesta al deseo de una vida todavía más plena?", indagó el papa, quien escuchó en respuesta un enfático y multitudinario "¡Sí!".
"Los llevo a ustedes en mi corazón", agregó Francisco, al despedirse en portugués de sus fieles y cerrar la cita que lo llevó a Brasil, en el primer viaje internacional de su pontificado, iniciado en marzo.