Para Reino Unido, política argentina hacia Malvinas "est&a
| El Ministro británico de Estado para América latina, Hugo Swire, quien visitará la próxima semana las Islas Malvinas, envió un mensaje a los kelpers en el que advirtió que la política del Gobierno argentino hacia al archipiélago "está condenada al fracaso".
Antes de emprender su viaje, que se superpondrá con la que hará un grupo de legisladores uruguayos, Swire remarcó que "si el Gobierno argentino cree que una retórica hostil y amenazas a los medios de subsistencia del pueblo de las Islas van a forzar al Reino Unido a negociar la soberanía de las Falkland, por encima de las personas que las habitan, está profundamente equivocado".
"El Gobierno Británico cumplirá con la responsabilidad que le impone la Carta de la ONU de respetar el derecho de ustedes a la libre determinación. La Argentina puede seguir optando por desoír la opinión de los Isleños, pero es una política destinada al fracaso", apuntó el ministro de Estado del Foreign Office y el Commonwealth.
En declaraciones reproducidas por el portal Mercopress, Swire destacó el referéndum realizado en las islas, subrayó que "el Gobierno británico cumplirá con la responsabilidad que le impone la Carta de ONU de respetar el derecho a la libre determinación" y remarcó que "el pueblo de las Islas Malvinas existe, tiene voz y se lo debe escuchar".
"Es una pena que el Gobierno argentino siga desoyendo este mensaje y que intente negarles el derecho humano fundamental de determinar su propio futuro. Es indignante que profiera amenazas contra quienes participan de emprendimientos económicos legítimos o trate de perjudicar a quienes buscan relaciones de comercio y prosperidad mutua con los vecinos de las Malvinas. Una nación de cuarenta millones de habitantes que ejerce presión sobre una comunidad de tres mil personas en el siglo XXI no es una imagen muy edificante", apuntó.
Y en este marco, insistió en que el Gobierno británico quiere "sentarse con el Gobierno argentino para hablar de una serie de temas concretos relativos al Atlántico Sur, entre ellos recursos naturales, comunicaciones y medidas de fomento de confianza", pero sostuvo que "estas reuniones no pueden, no deben y no van a excluir al Gobierno de las Islas Falkland, el cual debe participar de cualquier conversación que afecte su futuro", lo que es rechazado por la Casa Rosada.
"Creemos que tenemos mucho de que hablar, y que sería beneficiosa para todas las partes, y para la región, una mayor cooperación entre nosotros. La Argentina debería aprovechar esta oportunidad en lugar de despreciarla", completó.