ONU pide un cese de las hostilidades en oriente medio
| El proyecto de resolución acordado por Estados Unidos y Francia en el Consejo de Seguridad de la ONU pide un cese de las hostilidades y el despliegue de las fuerzas libanesas en el sur del Líbano, paralelamente a la retirada de las tropas israelíes.
El texto revisado, que será votado esta misma noche por el Consejo de Seguridad, también delinea un plan político con elementos para buscar un alto el fuego permanente y una solución del conflicto a largo plazo.
Concretamente, el texto insta al "cese completo de las hostilidades" y, en particular a que la milicia chií libanesa de Hizbulá detenga todos sus ataques y que Israel ponga fin a todas sus "operaciones militares ofensivas".
Una vez se haya alcanzado el cese de hostilidades, se pide al Gobierno del Líbano y a la Fuerza Provisional de la ONU en el sur del país (FPNUL) que desplieguen conjuntamente sus fuerzas, al tiempo que se exige al Gobierno de Israel a que paralelamente retire todas sus tropas.
Esto permitirá, según la resolución, que el Gobierno del Líbano amplíe su control a todo el territorio libanés, como se establece en la resolución 1559, de mayo de 2004, y en los acuerdos de Taif, que pusieron fin a la guerra civil libanesa (1975-1990).
En el texto se hace un llamamiento a las partes enfrentadas para que respeten la llamada Línea Azul, marcada por la ONU cuando Israel se retiró del sur del Líbano, en mayo de 2000.
Asimismo, se reitera la necesidad de preservar la integridad territorial, la soberanía y la independencia política del Líbano con sus fronteras reconocidas internacionalmente, como contempla el acuerdo de armisticio israelí-libanés de 1949.
En la resolución franco-estadounidense también se exhorta a la comunidad internacional a que tome las medidas necesarias para asistir en materia financiera y humanitaria al pueblo del Líbano, concretamente para que los 900.000 desplazados puedan regresar a sus casas y el gobierno pueda reabrir los puertos y aeropuertos del país.
Entre los elementos y principios políticos que deben conducir a una tregua permanente se menciona que ninguna fuerza extranjera puede ser desplegada en territorio libanés sin el consentimiento del Gobierno de Beirut.
También se estipula la prohibición de suministrar o adquirir cualquier tipo de armamento y municiones al Líbano, a excepción de las transacciones autorizadas por su gobierno.
Además, se pide que Israel proporcione a la ONU el mapa de zonas minadas en el Líbano, para que se puedan desactivar los explosivos.
En la resolución también se concreta el mandato que tendrá la FPNUL, que se encargará de supervisar el cese de las hostilidades y de coordinar el despliegue de las fuerzas libanesas y la retirada militar de Israel.
También realizará funciones humanitarias de distribución de ayuda a la población civil y el retorno de los desplazados, y asistirá al gobierno libanés en la aplicación del plan de acción política.
Para ello, la FPNUL, que cuenta ahora con 2.000 soldados, deberá ser reforzada y se autoriza hasta un máximo de 15.000 efectivos, por lo que la resolución pide al secretario general de la ONU, Kofi Annan, que emprenda las acciones necesarias para que el operativo de paz pueda desempeñar todas estas funciones.
En la misma resolución, se decide extender el mandato de la FPNUL hasta el 31 de agosto de 2007, plazo que podría revisarse durante este período de tiempo para ajustarse a los pasos que se vayan tomando en el plan de acción para una solución duradera.
Fuente: EFE.