Las pasteras ajustarían sus proyectos a pedido del BM
PAPELERAS | Luego de conocerse el informe de la Corporación Financiera Internacional (CFI) -organismo del Grupo Banco Mundial- que remarcó deficiencias de las plantas de celulosa que se construyen en el Uruguay, las empresas estarían dispuestas a adaptar sus proyectos a esas exigencias. Con eso despejarían las dudas que la CFI señaló en cuanto al impacto ambiental que producirán los emprendimientos.
Botnia y ENCE reconocieron que iniciaron contactos con el organismo de crédito multinacional y que está previsto que el viernes 21 se reúnan directivos de ambas empresas con técnicos de la Corporación Financiera Internacional para analizar un plan de instrumentación de las recomendaciones.
Ejecutivos de las dos firmas coincidieron en que recibieron las objeciones del nuevo informe “sin dramatismo”, aunque entendieron que se trata de exigencias nuevas, según publicó ayer el diario La Nación.
Desde Botnia se indicó que no tendrán problemas para hacer ajustes al proyecto sobre el tema ambiental. Desde ENCE se comentó que ya se han hecho contactos con el organismo internacional para encaminar la adecuación a las exigencias.
Sucede que quedó claro que, mientras no adapten sus
diseños, las plantas no contarán con el auxilio financiero del Banco Mundial. Esto resulta clave para los emprendimientos, sobre todo luego de la caída de los créditos que pretendían de parte del banco holandés ING y ante probables medidas de igual tener de otras entidades europeas.
El aval de la CFI también les permitiría acceder a Botnia a un seguro de riesgo de otra unidad del BM, la Agencia de Garantía de Inversión Multilateral (MIGA, por sus siglas en inglés), por 300 millones de dólares.
Por otra parte, trascendió que, en un giro inesperado, Botnia podría demandar al Estado uruguayo ante el tribunal arbitral del Banco Mundial, el Ciadi. Esto se debería a que la firma finlandesa entiendo que el vecino país no está respetando el tratado de reconocimiento recíproco de
inversiones firmado entre los gobiernos de Finlandia y Uruguay durante la gestión del ex presidente Jorge Battle.