PAPELERAS | El presidente de la compañia española, Pedro Oyarzábal, no descartó ningún lugar para la construcción de la planta de celulosa. La decisión final se conocerá en seis meses. En tanto, ratificó la "vocación" de solicitar al Banco Mundial financiamiento para las obras.
La compañía española Ence aseguró que "el año próximo" comenzará a construir su planta celulósica en Uruguay y, si bien no precisó su nuevo destino, no descartó que éste se mantenga sobre el río compartido con nuestro país y que conserve en uso el puerto que construyó a la altura de Fray Bentos.
"Tenemos alternativas seguras para estudiar. Todas nuestras localizaciones cumplen con los requisitos exigidos. Nos aseguramos que así sea", dijo el presidente de la productora española, Pedro Oyarzábal.
Según el diario La Nación, sus colaboradores ratificaron ayer la "vocación" de solicitar al Banco Mundial financiamiento para la construcción de la nueva planta. La Argentina había pedido a la entidad internacional que se abstuviera de concederlo hasta que concluyera el conflicto planteado con Uruguay ante la Corte de La Haya.
El directivo del grupo anunció un nuevo "plan estratégico" para que la firma se convierta en líder mundial. El documento reserva a la futura planta de Uruguay casi la mitad de su producción: un millón de los 2,3 millones de toneladas de pasta celulósica al año, propuesta como meta empresarial para 2011.
Esa fue la otra novedad porque, aunque no se tenga en claro aún su emplazamiento, sí se sabe que la futura planta producirá el doble de la originalmente pautada en Fray Bentos: un millón de toneladas de pasta celulósica al año, contra las 500.000 calculadas para la localización luego descartada.
"No, no conozco que haya habido ninguna", contestó Oyarzábal, consultado sobre una eventual reacción del gobierno argentino ante el cambio de planes. "No han dicho nada sobre el anuncio de relocalización y supongo que todo depende de cuál sea el sitio que elijamos para trasladarla", conjeturó.
Ante una pregunta concreta, el directivo optó por no desechar que el nuevo destino se mantenga sobre el río Uruguay. "Todas las localizaciones que manejamos como alternativas son seguras y todas cumplen los requisitos exigidos", contestó. Y se disculpó por no dar más precisiones para evitar "especulaciones inmobiliarias".
Sí aceptó la posibilidad de que la futura planta mantenga en uso el puerto construido a la altura de Fray Bentos. "Es susceptible de ser utilizado", contestó.
Se encargó, sin embargo, de poner límite a la incógnita sobre cuál será el emplazamiento finalmente elegido. "Como tenemos un calendario para empezar la construcción, no podemos tardar más de seis meses en tomar la decisión. Y mejor si lo tenemos antes", dijo.
El folleto que acompañó la presentación del nuevo plan nada dijo de las protestas argentinas contra la ubicación de la planta en Fray Bentos. Pero, al justificar el cambio de destino, menciona como objetivo adicional la búsqueda de "consenso". Consultado al respecto, Oyarzábal no dio precisiones sobre a quién se incluía en esa idea.
Rodeado de pizarras, gráficos y carteles con el slogan "más bosque, más vida", el directivo expuso en una conferencia de prensa el plan de inversiones que la empresa elaboró de aquí a 2011. Buena parte de las preguntas fueron de medios argentinos, referidas al futuro de la planta en Uruguay.
La construcción de la pastera de Fray Bentos llevó a la Argentina y a Uruguay a un enfrentamiento diplomático que se ventila aún ante el tribunal de La Haya.
Ante el conflicto, Ence resolvió cambiar la localización de su planta, y ahora presentó un plan estratégico en el que contempla inversiones por 2012 millones de euros -casi la mitad de ellos, en la pastera de Uruguay- y una reducción de puestos de trabajo que no precisó "Tenemos que negociar con los sindicatos", dijo.
Todo ello, con el objetivo de lograr una sensible baja en los costos de producción y resultados récord a partir de 2011, momento en el que aspira a que la planta de Uruguay esté ya en pleno funcionamiento.
Fuente: Télam.