Israel continuará con su ofensiva contra el Líbano
| El ministro de Defensa israelí, Amir Peretz, ha afirmado, en un acalorado debate en el Parlamento, que su país no puede aceptar un alto el fuego inmediato, a pesar de las 48 horas de suspensión de sus ataques aéreos sobre el sur del Líbano, que comenzaron la pasada madrugada.
"Si se declara, los extremistas levantarán sus cabezas de nuevo. En unos meses estaríamos en la misma situación", ha asegurado el responsable de Defensa en la sesión extraodinaria convocada en la Knesset sobre la ofensiva bélica contra la guerrilla de Hizbulá en el país vecino.
Las palabras de Peretz llegan después de que la secretaria de Estado de EEUU, Condoleezza Rice, dijera esta mañana, poco antes de abandonar Jerusalén con destino Washington, que esta misma semana puede conseguirse un alto el fuego.
Rice se lamentó por la tragedia de Qaná, en la que murieron 57 civiles, la mayoría niños, pero agregó que Beirut "debe tener el control de todo el territorio de Líbano" y evitar que el sur esté bajo dominio de Hizbulá.
A pesar de la supuesta tregua en el sur del Líbano, el Ejército israelí ha disparado contra un puesto militar en la principal carretera de esta zona y ha matado a un soldado y herido a otros tres. Este ataque es el primero ocurrido en las supuestas 48 horas de tregua decretadas por Tel Aviv para facilitar la salida de civiles e investigar su propio ataque.
El alto el fuego temporal se produce después de que el sábado el primer ministro israelí, Ehud Olmert, informara a Rice de que su Ejército necesita entre 10 y 14 días para terminar su ofensiva contra el Líbano.
Además, Israel coordinará con la ONU el establecimiento de un corredor de seguridad (o "ventana de salida", de acuerdo con la denominación empleada) con una vigencia de 24 horas para que los residentes en el sur del Líbano puedan abandonar la zona, si lo desean, indicaron las fuentes.
El primer ministro libanés, Fuad Siniora, pidió ante el cuerpo diplomático en el Líbano un alto el fuego "incondicional e inmediato" tras lo que calificó de "nueva matanza israelí". "No se puede esperar que negociemos o discutamos otra cosa mientras la espada despiadada y brutal de la máquina de guerra israelí continúa derramando la sangre de mujeres y niños inocentes", dijo Siniora en su declaración ante los embajadores.
Una vez más, Siniora reiteró el apoyo de todo su gobierno, incluyendo los ministros de Hizbulá, al "plan de siete puntos" que recoge un alto el fuego inmediato, la retirada de Israel de todas las zonas que ocupa, incluidas las Granjas de Cheba, y el despliegue del ejército libanés en el sur del país, entre los detalles más importantes.
Fuente: EFE.