| Una nueva revelación promete profundizar el escándalo. Los fiscales estadounidenses afirmaron ayer que Guido Alejandro Antonini Wilson, el empresario venezolano que ingresó en Buenos Aires con 800.000 dólares en una valija, había recibido ofertas de agentes venezolanos por 2 millones de dólares a cambio de su silencio.
“Ofrecieron 2 millones para que ocultara” que el dinero provenía de Venezuela y que “estaba destinado a la campaña presidencial en la Argentina”, sostuvo el fiscal Thomas Mulvihill, en la audiencia previa al juicio en una corte federal de Miami contra tres venezolanos y un uruguayo, acusados de ser agentes encubiertos de Venezuela.
Mulvihill no identificó cuál de los acusados hizo la oferta, pero aseguró que la familia de Antonini recibió amenazas para obligarla a colaborar con los servicios de seguridad venezolanos para encubrir el envío de dinero que Antonini llevó a la Argentina en agosto para la campaña presidencial.
En tanto, el uruguayo Rodolfo Edgardo Wanseele Paciello, uno de los cuatro detenidos, podrá salir en libertad bajo fianza de 150.000 dólares, según determinó ayer el Juzgado de distrito del sur de la Florida.
Paciello fue el único de los detenidos que presentó su caso ayer ante el juez en una audiencia que duró 50 minutos. Los otros tres detenidos, los venezolanos Moisés Maionica, Franklin Durán y Carlos Kauffmann, estuvieron presentes en la sala, pero no hablaron ni fueron representados por sus abogados.
Mulvihill fue quien la semana pasada describió las sospechas trazadas en la acusación por escrito, cuando relató que uno de los detenidos dijo que los casi 800.000 dólares eran para ayudar “a la campaña presidencial de Cristina Kirchner”.