Gala de famosos en TV recaudaron U$S30 millones para los damnificados
| Tres escenarios, mitad plató mitad capilla laica, han servido para presentar el austero, emocionante telemaratón Hope for Haití now. En una obvia demostración de que los estadounidenses son príncipes del espectáculo, que saben manejar tiempos y tonos, el programa, organizado por George Clooney, tenía como misión recaudar dinero para un país devastado.
Fue emitido desde Los Angeles, Nueva York y Londres, con continuas conexiones a Puerto Príncipe, donde la estrella de la CNN Anderson Cooper se encuentra destacado desde el día posterior al terremoto. Detrás, decenas de estrellas, hablando entre canción y canción (caso de Tom Hanks, Morgan Freeman, Clint Eastwood, Matt Damond, Julia Roberts, Brad Pitt), suplicando a los televidentes que aliviaran la tragedia con sus contribuciones, cumpliendo sin poses ni ironías, comprometidos con un espacio entre esperanzado y sombrío, donde los mensajes redentoristas apenas aliviaban su agradecible laconismo.
Mientras Renée Zellweger, Jack Nicholson, Steven Spielberg, Jennifer Aniston, Courtney Cox, Colin Farrell, David Arquette, Tim Robins, Mel Gibson o Ringo Starr, entre otros, atendían teléfonos, Alicia Keys abría fuego con Prelude to a kiss. La siguieron Coldplay, Halle Berry hablando de los niños perdidos por las calles, y Bruce Springsteen, que acompañado de parte de la E Street Band interpretó una austera versión de We shall overcome, el himno de la lucha por los derechos civiles.
Poco después Leonardo Di Caprio (que ha donado un millón de dólares) solicitaba nuevas contribuciones y Stevie Wonder enlazaba A time to love con Like a bridge over troubled water de Paul Simon. Faltaban todavía muchos nombres insoslayables, y también ciudadanos anónimos, haitianos que periódicamente tomaban el podio de los mitos y hablaban sobre los cementerios sin suficiente tierra, sobre cientos, miles de cuerpos apilados y gente muriendo lentamente.
John Legend entonó el viejo espiritual Sometimes I feel like a motherless child, Madonna demostró que, botox aparte, sigue siendo la reina con su interpretación, entre sentida, hortera y definitiva, de Like a prayer, Shakira cantó I´ll stand by you, Mary J. Blige el clásico folk Hard times come again no more, Sting un inflado Driven to tears, Beyoncé cantó con Chris Martin, Neil Young junto a Dave Matthews (en una interpretación estremecida como la sonrisa de una navaja) y Bono & The Edge con Rihana y Jay-Z.
El programa, una lección de espartana elegancia, fue ofrecido de manera simultánea por las cadenas ABC, NBC, CBS, CNN, FOX, VH1, The CW, CMT, MTV, HBO, BET, etc. Las actuaciones de la noche, entre las que también cabe citar a Justin Timberlake versioneando el Hallelujah de Leonard Cohen, así como el vídeo, pueden comprarse ya en iTunes.
La retransmisión alcanzó una audiencia de 22 millones de espectadores y durante la gala se recaudaron 30 millones de dólares.
Fuente: El Mundo.