| Tras el atentado a la revista satírica Charlie Hebdo y las tomas de rehenes que finalizaron con los tres principales sospechosos muertos en dos asaltos coordinados de la policía, 700·000 personas manifestaron hoy en Francia para repudiar los ataques que dejaron 17 muertos
Mientras el gobierno decidió mantener su plan antiterrorista en alerta máxima, mañana se realizará en París una "Marcha Republicana" que promete una concurrencia histórica y de la cual participará el Presidente Francois Hollande junto a decenas de dirigentes pollitos de todo el mundo.
"Francia fue atacada durante tres días. La amenaza de la que somos blanco aún no terminó", reconoció anoche, tres horas después de la resolución de una de las semanas más violentas en Francia en décadas.
Horas mas tardes, en una grabación difundida en sitios islamistas Al Qaeda en Yemen felicitó a los autores del ataque contra Charlie Hebdo,
"Los que agreden al profeta recibieron una lección. No estarán en seguridad, habrá más atentados", sostiene la grabación, seguí dio cuenta el diario Libération.
Esta mediodía, el Primer Ministro Manuel Valls, al salir de una reunión de crisis con el presidente, confirmó que mantendrá "las medidas excepcionales" porque "aun estamos buscando a los cómplices".
"Cuando hay 17 muertos es seguro que hubo errores", consideró ante la critica de los medios a los servicios secretos, y ajustó: "Tenemos en cuenta el contexto, estamos expuestos a riesgos, por eso el plan antiterrorista se mantendrá en su máximo nivel".
Valls informó que son cinco los detenidos que siguen siendo interrogados, todos familiares o del circulo cercano a los atacantes abatidos, los hermanos Cherif y Said Kouachi, de 32 y 34 años, y Amedy Coulibaly, de 32.
"Aun estamos buscando a una cómplice", expresó, en referencia a la mujer de Coulibaly, Hayat Boumeddiene, una joven de 26 años, quien según fuentes policiales citadas por Le Figaro se encontraría en Siria desde el 8 de enero.
Boumeddiene, quien desde ayer era intensamente buscada por la policía había sido sospechada de participar junto a Coulibaly del asesinato de una mujer policía el jueves en Montrouge, en un suburbio al sur de la capital.
El dia después a los operativos casi simultáneos realizados por las fuerzas especiales para abatir a los tres atacantes, numerosos detalles salieron a la luz en la prensa francesa.
Prófugos durante 48 horas, en la mañana del viernes, tras una persecución y tiroteo, los hermanos Kouachi se atrincheraron en una imprenta de la localidad Dammartin-en-Goele, (40 km al noreste de París), con un rehén.
No obstante, el rehén, de 26 años y que salió ileso, nunca fue descubierto por sus captores al permanecer escondido bajo un lavabo en el primer piso las siete horas que duró el atrincheramiento de los hermanos Kouachi. Con su teléfono, el joven brindó detalles a la policía.
Cerca de las 17 horas, los parisinos Kouachi comenzaron a disparar con sus ametralladoras kalashnikov sobre las fuerzas del orden, que respondieron con granadas y armas automáticas, y un minuto después salieron de la imprenta.
Rápidamente fueron abatidos por los francotiradores.
Los hermanos Kouachi fueron considerados el jueves como "héroes" por la agrupación Estado Islámico (EI) por su ataque a Charlie Hebdo, que pese al atentado saldrá a la venta el miércoles con una tirada de un millón de ejemplares.
Según el diario Le Monde, como la policía temía que al enterarse de la muerte de los hermanos Kouachi, el secuestrador del supermercado judío tomara represalias con los rehenes como había advertido, la policía intervino pocos minutos después en París.
En un video amateur filmado por un vecino de la zona, difundido por el canal publico France 2, la brigada de elite BRI, que seguía los movimientos de Coulibaly por las cámaras de seguridad del supermercado y sabia que los rehenes se encontraban en la cámara de frío, lanzo explosivos en las dos puertas del local y comenzó a intercambiar disparos con el joven francés.
Tras responder con su ametralladora durante algunos segundos, Coulibaly se lanzó en carrera desde las cajas del supermercado hacia la veintena de efectivos de la BRI, que como muestra la filmación, acribillaron al atacante.
Después de la resolución de las dos tomas de rehenes, el canal BFM TV dio a conocer dos entrevistas con los autores del atentado.
Por la mañana, un periodista del canal de noticias llamó a la imprenta de Dammartin-en-Goele y fue atendido por Said Kouachi, quien reivindicó haber sido enviado por Al Qaeda en Yemen.
"No hemos matado ningún civil, las muertes de Charlie Hebdo eran blancos a eliminar", relató con tono sereno.
En tanto que poco antes del asalto de la policía al supermercado judío para liberar a los rehenes, Coulibaly se comunicó con BFM TV -canal criticado estos días por su sensacionalismo- para reivindicar su lazo con el Estado Islámico (EI), organización enfrentada a Al Qaeda.
El joven parisino afirmó que había recibido financiación del exterior y que estaba "sincronizado" con los hermanos Kouachi, para que "ellos se encargaran de Charlie Hebdo y yo de los policías".
Coulibaly, preso por terrorismo entre sus 23 y 26 años y que en 2009 fue recibido por el entonces presidente Nicolas Sarkozy como un ejemplo de la reinserción tras salir de la cárcel, exigió en la entrevista que Francia "se retire de los territorios dominados por EI".
Hoy, más de 700.000 personas se manifestaron hoy en toda Francia para condenar el atentado, en la víspera a una gran "Marcha Republicana" en París, a la cual Hollande y todo su gobierno llamó a los franceses a participar.
De a manifestación, que por tres recorridos diferentes unirá las plazas de la República y Nacion, participarán casi todos los sindicatos, religiones y partidos políticos, excepto el ultraderechista Frente Nacional (FN), que no fue invitado por el gobierno y marchará mañana por separado otras ciudades francesas.
En un hecho inédito, el Presidente socialista Francois Hollande participará de la marcha junto a la Canciller alemana Angela Merkel, el Primer Ministro británico David Cameron, el Jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, el Canciller ruso Serguei Lavrov o su homologo israelí Avigdor Lieberman, entre otros altos dirigentes políticos mundiales.
"Todos los franceses deben venir a defender el laicismo. Garantizaremos la seguridad para que todos puedan manifestarse", declaró este mediodía el premier Valls para llevar tranquilidad a la población en momentos donde los rumores de atentados y falsas alarmas potencian la psicosis colectiva que se vive en el país galo.
En total 2.200 policias, incluyendo francotiradores, serán desplegados mañana en París.
Entretanto, en medio de ataques a centros de culto musulmán y la toma de rehenes en el supermercado kosher, el ministerio del Interior sumó 500 militares en la región parisina a los 88.000 efectivos desplegados en todo el país, espacialmente en los principales puntos turísticos y de culto.
Anoche, otras tres mezquitas fueron atacadas a tiros o profanadas, totalizando un veintena en de ataques a centros de culto musulmán o a musulmanes agredidos en las calles.
Las profanaciones preocupan al gobierno y a la comunidad musulmán (en Francia viven más de cinco millones de musulmanes), quienes reclamaron condenar con firmeza estos actos y exigen no caer en la "estigmatizaron".