Domingo 14 de Mayo de 2017, 18:13

El Papa canonizó a los hermanos Jacinta y Francisco Marto

Sociedad | El Papa Francisco canonizó a los hermanos Jacinta y Francisco Marto, dos de los tres pastorcitos que aseguraron haber visto a la Virgen hace exactamente cien años en Fátima.


Ambos no fueron canonizados por haber sido testigos de las sensacionales apariciones de la Virgen en 1917, sino por cómo vivieron y testimoniaron la fe en sus escasos años de vida, más allá de la oposición, amenazas y hasta castigos sufridos a tan corta edad. El "milagro" necesario para que sean canonizados no ocurrió en Portugal sino en otro país lusofono: Brasil, donde se les atribuyó la curación milagrosa de un nene en 2013. Entonces el pequeño Lucas Batista, que tenía 5 años, se cayó por una ventana desde una altura de más de seis metros y sufrió un grave traumatismo cráneo , recordó su padre, Joao. Fue transferido desde su pueblo de Juranda al hospital de Campo Mourao, en el estado de Paraná, "donde llegó con un coma muy grave y sufrió dos paros cardíacos antes de ser operado de urgencia", explicó. "Los médicos le daban pocas posibilidades de sobrevivir", señaló su padre. Tras contactar con una comunidad de Carmelitas, la familia del niño, ya "muy devota" de Nuestra Señora de Fátima, comenzó a invocar a los pastorcitos. "Dos días más tarde, Lucas se despertó. Se encontraba bien y comenzó a hablar", aseguró Batista. El niño abandonó el hospital 12 días después del accidente. "Se recuperó totalmente, sin secuelas", aseguró su padre, al agregar que "los médicos, incluidos no creyentes, no pudieron explicar esta recuperación". "Agradecemos a Dios por la sanación de Lucas y sabemos, con toda la fe de nuestro corazón, que fue obtenida gracias al milagro obrado por los pequeños pastores Francisco y Jacinta", dijo Joao, muy emocionado, desde el santuario de Fátima donde fue a esperar al Papa Francisco. Los dos niños murieron por la "gripe española" en 1919 y 1920, a la edad de 10 y 9 años respectivamente y fueron beatificados por el papa Juan Pablo II en Fátima, el 13 de mayo de 2000. En tanto su prima Lucia dos Santos, la mayor de los tres pastorcitos, se hizo monja y vivió hasta los 97 años. El Vaticano se plantea beatificarla desde 2008, tres años después de que falleciera.