| El ministro de Sanidad libanés anunció que ya son al menos 175 los civiles muertos por los bombardeos israelíes, que se iniciaron el miércoles contra el Líbano tras la captura de dos soldados israelíes por milicias de Hizbulá.
El titular de Sanidad, Mohamed Jalife, indicó también que al menos 500 personas han resultado heridas en los seis días consecutivos de la ofensiva israelí lanzada por aire, mar y tierra contra este país de Oriente Medio.
El ministro reveló que su departamento actúa en cooperación con las ONG y organizaciones humanitarias para "poder hacer frente a la situación", y advirtió que el personal sanitario afronta dificultades para asistir a las víctimas por la casi imposibilidad de acceder a las zonas afectadas.
Asimismo, Jalife manifestó su temores de que se produzca un colapso por la escasez de algunos medicamentos si la situación no cambia.
Mientras tanto, el jefe del Sindicato de Médicos de Líbano, Mario Aoun, hizo un llamamiento a sus afiliados para que acudan a los hospitales para ayudar en la atención a los heridos.
El dirigente sindical también indicó que su organización ha creado una unidad especial para transportar a los médicos a las zonas devastadas por los bombardeos.
Por otra parte, varios misiles israelíes cayeron cerca de un edificio donde residen familias del personal civil de la ONU, que se encuentran aislados en la ciudad costera de Tiro, al sur de Beirut.
"Los misiles impactaron a unos 50 metros del lugar donde residimos y causaron daños en dos vehículos que tenían el emblema de la ONU", dijo uno de los parientes de los funcionarios de la organización internacional, que declinó identificarse.
Manifestó su sorpresa porque el ataque ocurrió después de que en la mañana de hoy colocasen el símbolo bien visible de Naciones Unidas en la azotea del edificio en que residen, y un gran cartel indicativo a su entrada.
"Nadie hace nada por nosotros. Nos tienen abandonados", agregó la fuente, en alusión a la evacuación llevada a cabo hoy por la ONU de su personal destacado en Beirut, mientras que permanecen los miembros de la organización en el sur de la capital libanesa a la espera de recibir ayuda.
"Recibimos a menudo mensajes (de la ONU) a través de nuestros teléfonos móviles para que nos movamos y sigamos sus instrucciones. No sé si esperan a que perezcamos para que hagan algo", concluyó la fuente.
Fuente: EFE.