Mohamed Merah, el sospechoso de siete asesinatos que estaba atrincherado en un edificio de Toulouse, murió el jueves tras haber resistido a los hombres de la unidad de élite de la policía que habían entrado en su piso, indicaron fuentes policiales.
Las fuentes indicaron que hubo tres policías heridos, uno de ellos en estado grave. Poco antes se habían oído intensos disparos y explosiones durante cinco minutos.
Merah habría muerto aún “con armas en sus manos”, indicó el enviado especial de “Le Monde”.