Duros cruces entre israelíes y palestinos en la ONU
| En una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU, convocada de urgencia a pedido de Palestina tras el inicio de la incursión terrestre israelí en Gaza, Israel y Palestina se cruzaron acusaciones y la mayoría de los países que intervinieron llamaron a acordar cuanto antes un alto el fuego.
"Hemos pedido esta reunión de emergencia (...) por la crisis existencial a la que se enfrenta el pueblo palestino bajo ocupación israelí", explicó el representante palestino ante la ONU, Riyad Mansur.
Según Mansur, "cada momento que pasa, la vida de otro niño, madre o padre palestino es cruelmente arrebatada por las fuerzas de ocupación israelíes" en la "salvaje agresión" en curso.
El diplomático aseguró que en las últimas 24 horas los ataques del Ejército israelí destrozaron viviendas e infraestructura, desplazaron a miles de familias y causaron la muerte de más de 40 palestinos (al fin del día de hoy, todas las fuentes suben la cifra a casi 60). Entre las víctimas, señaló Mansur, hay "muchos niños".
Mansur acusó a Israel de estar cometiendo "crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad, terrorismo de Estado y violaciones sistemáticas de los derechos humanos" y aseguró que si el Consejo de Seguridad de la ONU no actúa para proteger a los civiles palestinos, las autoridades acudirán a la Justicia internacional.
El embajador israelí ante la ONU, Ron Prosor, aseguró que su Gobierno no ha tenido más remedio que entrar finalmente en Gaza para "restaurar la calma para el pueblo israelí y degradar las capacidades terroristas de Hamas". Según Prosor, Israel aceptó "cada alto el fuego ofrecido, incluso mientras los israelíes estaban bajo ataque, pero Hamás rechazó cualquier oportunidad".
Pidió en cambio apoyo de la comunidad internacional para evitar más violencia por parte del movimiento islamista y para "acabar con la amenaza terrorista que cierne su sombra sobre el pueblo de Israel", recordando que desde Gaza se han lanzado en el último mes más de 1.500 cohetes contra Israel, que también ha recibido fuego desde Siria, el Líbano y el Sinaí.
"La gran moderación de Israel se ha encontrado con una agresión desatada", denunció Prosor, quien acusó a Hamas de terminar con sus ataques con la última tregua humanitaria.
"Ningún país del mundo toleraría un asalto así contra sus ciudadanos y no puede esperarse que Israel lo haga. Estamos actuando únicamente para defender a los israelíes de constantes ataques terroristas", reiteró.
Prosor fue apoyado por la embajadora estadounidense, Samantha Power, que, en línea con lo expresado horas antes por el presidente Barack Obama, señaló que los ataques por parte de Hamas son inaceptables.
Otros miembros del consejo, mientras, censuraron claramente la actuación por parte israelí, caso de Rusia y de China, que consideraron "inaceptables" los ataques contra civiles palestinos en Gaza.
La mayoría de los países que intervinieron en el debate llamaron a negociar un alto el fuego cuanto antes, un esfuerzo que tratará de apoyar el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, en una visita a Oriente Próximo.
El subsecretario político de Naciones Unidas, Jeffrey Feltman, que representó a Ban en la reunión, condenó el lanzamiento "indiscriminado" de cohetes desde Gaza y aseguró que la preocupación de Israel por su seguridad es "legítima", pero criticó la "dura respuesta" que está dando a los ataques.