NEW YORK | Las autoridades aseguran que los “terroristas” intentaban destruir el oleoducto que alimenta a la estación aérea. Cuatro personas fueron apresadas por el episodio que, sin embargo, no tenía prevista una concreción inminente.
Las autoridades norteamericanas frustraron hoy un supuesto plan para destruir el oleoducto que alimenta con nafta al aeropuerto John F. Kennedy de la ciudad de Nueva York. Cuatro personas fueron apresadas, acusadas de participar en el supuesto complot contra la estación aérea.
La información fue difundida este sábado por el Departamento de Justicia norteamericano que adjudicó a cuatro personas la elaboración del plan del supuesto atentado, “entre ellos un ex miembro del Parlamento de Guyana y un ex empleado de abastecimiento de aviones en el aeropuerto Kennedy”.
Los funcionarios del gobierno del presidente George W. Bush sostienen que los sospechosos pretendían “instalar explosivos para hacer estallar los principales depósitos y tuberías de queroseno” del principal aeropuerto de Nueva York.
Por su parte, las fuerzas antiterroristas arrestaron a uno de los acusados, Russell Defreitas, el antiguo empleado en la terminal aérea, mientras que el guyanés Abdul Kadir y el trinitense Kareem Ibrahim se encuentran detenidos en Trinidad y Tobago. El cuarto inculpado, el guyanés Abdel Nur todavía no ha sido apresado, según un comunicado divulgado por la fiscal federal Roslynn Mauskopf.
La cadena de televisión CNN, citando una fuente oficial, informó que los cuatro sospechosos planificaban un ataque a instalaciones del aeropuerto, y el canal WNBC en Nueva York anunció que el ataque tenía como objetivo un conducto de combustible para aviones.
Las autoridades estimaron que ninguno de los atentados era inminente y que no se habían complotado ningún plan contra aviones.
Defreitas habría contratado a un informante del FBI para que lo ayudase a hacer estallar tanques y conductos de combustible para aviones en el aeropuerto, dijeron fuentes oficiales a la cadena de televisión ABC.
Además, ABC informó que el ex trabajador había estado bajo vigilancia y supuestamente se habría reunido con un grupo radical en Trinidad y Tobago. El plan terrorista debía de ponerse en práctica durante los próximos dos a tres años, aunque algunas fuentes alegan que los conspiradores ya estaban listos para ponerlo en marcha, reportaron desde la cadena ABC.
El aeropuerto internacional John F. Kennedy es una de las tres estaciones aéreas de pasajeros que operan en Nueva York, y el más grande de la ciudad. Durante 2005, 350 mil aviones despegaron y aterrizaron transportando 40,8 millones de pasajeros y 1,7 millones de toneladas de carga, según el sitio oficial del aeropuerto.
Fuente: AFP.