PAPELERAS | Hoy se inician las audiencias convocadas por la Corte Internacional de Justicia de La Haya. Argentina solicitará una medida cautelar, para que sea paralizada en forma provisional, la construcción de las dos plantas de celulosa en Fray Bentos, frente a Gualeguaychú, hasta tanto quede despejada la duda sobre el riesgo de contaminación ambiental. Uruguay argüirá que las pasteras no representan un riesgo grave e irreversible al medio ambiente.
La delegación encabezada por la consejera legal de la Cancillería, Susana Ruiz Cerruti, ultimaba ayer los detalles para defender los argumentos de la demanda iniciada el 4 de mayo por la Argentina, y enriquecerla con nuevos elementos frente a los quince miembros del máximo tribunal de las Naciones Unidas.
Se entregarán textos media hora antes de la exposición, traducidos en francés y en inglés, los dos idiomas oficiales de la Corte, los cuales serán enriquecidos con material gráfico, videos y fotos. Mañana, cada parte dispondrá de dos horas (la Argentina, entre las 10 y las 12, y Uruguay, entre las 16.30 y las 18.30) para las réplicas mutuas.
Los delegados argentinos apuntan a lograr una medida de conservación, como objetivo inmediato, y una pena, si cabe, por la virtual violación del Estatuto del Río Uruguay, como cuestión de fondo.
Después de la presentación de la Argentina, la delegación uruguaya, encabezada por el embajador en Francia, Héctor Gros Espiell -canciller durante el gobierno de Luis Lacalle-, y el embajador en los Estados Unidos, Carlos Gianelli, y coordinada por el secretario de la Presidencia, Gonzalo Fernández, planteará que no hay razones para detener las obras ni para acusar a su país de violar el Estatuto del Río Uruguay, de 1975. "Ni Uruguay vulneró derechos ni las pasteras representan un riesgo grave e irreversible para el ambiente", argumentan.
Fuente: La Nación.