| Los presidentes George W. Bush y Luiz Inacio Lula da Silva sellaron el viernes en Brasil una alianza en bio-combustibles que puede significar inversiones en América Latina y una menor dependencia del petróleo y de la influencia de países como Venezuela.
"Creo que Brasil y Estados Unidos tienen la capacidad de ayudar a liderar el camino" para fomentar un cambio en la matriz energética internacional, dijo Bush en la breve declaración de prensa, junto a Lula, tras una distendida visita a un terminal de distribución de bio-combustibles de Sao Paulo.
"Si dependemos del petróleo llegado del extranjero, tenemos un problema de seguridad nacional", añadió Bush. Estados Unidos y Brasil firmaron un memorando de entendimiento en el que expresan su intención de cooperar en investigación, pero también para exportar el consumo y la producción del etanol en el mundo, y hasta para crear un mercado global de bio-combustibles, con normas y padrones uniformes.
La mira para la exportación se concentra inicialmente en Centroamérica y el Caribe, donde ambos países pretenden "comenzar a trabajar". Esa región ya expresó interés en el etanol. La expansión del etanol persigue varios objetivos: diversificación de los recursos energéticos, promoción del crecimiento económico, avance de la agenda social y mejora del medio ambiente, señala el documento de ambos mandatarios.
"Este memorando es nuestra respuesta al gran desafío energético del siglo XXI", dijo Lula, quien consideró que la alianza binacional puede significar un nuevo momento para la industria automotriz y de combustibles en el mundo. Brasil y Estados Unidos no evocaron en el documento los reclamos brasileños, que pretenden el fin de los aranceles estadounidenses al etanol brasileño. Lula había insistido que trataría ese tema con Bush y que le reclamaría por los impuestos aduaneros.
"Los temas relacionados con el comercio nacional y tarifas deben ser tratados en otros foros multilaterales, regionales y bilaterales", señala el documento. Brasil exportó en 2006, 3.500 millones de litros de etanol hacia Estados Unidos, cuya producción de alcohol de maíz es subsidiada por Washington. Brasil envió 1.800 millones de litros.
La industria brasileña reclama que se reduzcan las tarifas aduaneras de 0,54 dólares por galón que Estados Unidos cobra al etanol brasileño. Brasil y Estados Unidos producen el 70% del etanol mundial. Más del 80% de los vehículos nuevos vendidos en Brasil disponen de tecnología que les permite funcionar con etanol y gasolina, indistintamente.
Bush llegó la noche del jueves a Sao Paulo, la capital financiera de Brasil, en medio de fuertes medidas de seguridad y protestas. El presidente estadounidense tiene previsto viajar posteriormente a Uruguay, Colombia, Guatemala y México.
Fuente: AFP-NA.