| En medio de la crisis financiera, el presidente de Estados Unidos hizo el anuncio ante los medios de su maniobra económica anticipada por funcionarios federales. El Departamento del Tesoro invertirá U$S 250 mil millones para estatizar deudas de bancos.
Bush aseguró que para ello se utilizará "una porción" de los 700.000 millones de dólares que aprobó el Congreso para rescatar la economía, informó la agencia DPA.
Varios medios publican este martes que la porción será de hasta 250.000 millones de dólares, según adelantó el lunes el secretario del Tesoro, Henry Paulson, a varias entidades.
Estados Unidos sigue así la línea marcada por varios países europeos de tomar participaciones en bancos, que podrán recomprarlas una vez obtengan la liquidez y la estabilidad necesarias.
En un principio Washington planificó que el grueso de su plan se destinase a comprar los valores "tóxicos", principalmente inmobiliarios, que están lastrando los mercados.
En un discurso en los jardines de la Casa Blanca antes de que abriesen los mercados bursátiles estadounidenses, Bush prometió que las medidas "contienen salvaguardias para proteger a los contribuyentes", que el papel del gobierno será "limitado y temporal", y que la intención no es "conquistar el mercado, sino protegerlo".
Bush anunció además que el gobierno garantizará "la mayor parte" de la nueva deuda emitida por los bancos, expandirá las garantías para las transacciones que no impliquen intereses y que la Reserva Federal se presentará como "comprador de último recurso" para el papel comercial.
El presidente insistió en pedir comprensión a los ciudadanos, y les aseguró que el rescate de los bancos es para beneficio general.
"Reconozco que las acciones que los líderes están tomando aquí en Washington y en las capitales europeas puede parecer distante", aseguró. "Pero estos esfuerzos están diseñados para beneficiar directamente a los estadounidenses al estabilizar nuestro sistema financiero en general y ayudar a la recuperación de nuestra economía".