PAPELERAS | De un estudio (de una consultora canadiense) difundido en la página oficial de la Corporación Financiera Internacional, un organismo del Banco Mundial, se desprende que la planta de la empresa Botnia usa 13 químicos peligrosos y generará 150 toneladas anuales de tóxicos. Destaca incluso el peligro de transportar esos materiales hasta la planta.
La consultora canadiense Ecometrix, que trabajó para el Banco Mundial (BM), informó que la planta de celulosa de Botnia utiliza 13 químicos peligrosos, la mayoría de los cuales serán llevados a la fábrica por barco y destacó que a largo plazo generará 150 toneladas anuales de residuos tóxicos.
El informe de la consultora, que dio su visto bueno al inicio de las actividades de Botnia, fue difundido por internet por la Corporación Financiera Internacional (CFI), un organismo dependiente del BM, según publicó en su edición de hoy el diario UNO de Paraná. De acuerdo con esa información la planta de Botnia de Fray Bentos producirá a largo plazo 150 toneladas anuales de residuos peligrosos.
El informe, que se denomina "Monitoreo independiente de desempeño con arreglo a los requisitos de la Corporación Financiera Internacional" indicó que en la planta utilizan 13 materiales peligrosos. Según el informe, los principales riesgos químicos son: "producción y manipulación de dióxido de cloro, producción de clorato de sodio, producción de peróxido de hidrógeno, almacenamiento de ácido sulfúrico, almacenamiento de hidróxido de sodio, almacenamiento y manipulación de productos químicos en la planta de Kemira, formación de sulfuro de hidrógeno, formación de metanol y otras áreas donde se manipulan sustancias químicas".
En 90 páginas, dijo el diario provincial, se detalla el Plan de Acción Ambiental y Social (ESAP) de la empresa, que incluye 16 acciones, entre ellas los planes de Gestión de Materiales Peligrosos, de Preparación y Respuestas ante Emergencias y de Gestión de Residuos Sólidos, entre otros.
A continuación se enumeró los 13 materiales peligrosos que son utilizados en la planta, dos de ellos producidos por la firma también finlandesa Kemira y llevados en camión, que son el clorato de sodio, cuyo peligro radica en ser oxidante, y el peróxido de hidrógeno, que es oxidante y corrosivo. Otros nueve se trasladan en barco por el río Uruguay, como por ejemplo una tonelada anual de amoníaco y 48.000 toneladas al año de clorato de sodio. En cuanto a los residuos peligrosos que generará la fábrica, se estima que a largo plazo serán entre 100 y 150 toneladas al año, entre ellos: aceites, solventes, baterías, plaguicidas, residuos de laboratorios, luces fluorescentes y detergentes.
Fuente: DyN.