| El candidato del Partido Demócrata alcanzó los 270 electores que le permitirán seguir al frente de la Casa Blanca hasta 2016. "Esto sucedió gracias a ustedes. Gracias", escribió el ganador en Twitter.
El Presidente Barack Obama consiguió el martes un segundo mandato al frente de la Casa Blanca tras imponerse a su rival republicano Mitt Romney en la mayoría de los estados clave y superar las dudas sobre su manejo de la economía, según proyecciones de las principales cadenas de televisión de Estados Unidos.
Tras una larga y dura campaña donde se pusieron en cuestión dos modelos de país sustancialmente diferentes, el mandatario demócrata superó a Romney en estados clave, pese a que la economía todavía no logra recuperarse plenamente y a que el desempleo sigue alto a nivel nacional.
Obama -que se impuso en estados como Nueva York, California, Pensilvania y Ohio- consiguió los 270 votos necesarios en el Colegio Electoral, lo que le asegura su reelección, destacaron las cadenas MSNBC, CNN y CBS.
Romney solamente ganó uno de los estados clave, Carolina del Norte, de acuerdo a las proyecciones de la televisión.
"Esto pasó gracias a ustedes. Gracias", escribió Obama en su cuenta de Twitter apenas MSNBC lo declaró ganador. Sus seguidores de inmediato comenzaron a festejar en Chicago, donde funciona el comando de campaña del mandatario.
No hubo comentarios de inmediato de la campaña de Romney sobre los resultados dados a conocer por las cadenas locales.
Los triunfos de Obama en los estados más discutidos, aunque con escaso margen, ponen fin a las esperanzas de Romney de conseguir los 270 votos electorales necesarios para conquistar la Casa Blanca.
La cadena CBS proyectó que Obama se impuso en Colorado, otro de los estados más disputados, por lo que el resultado de Ohio pasó a ser menos decisivo.
Mientras que los seguidores de Obama celebraban en Chicago, el centro de Romney en Boston tenía un aspecto lúgubre mientras los anuncios de los resultados se veían en las pantallas gigantes instaladas en el lugar.
Mucha gente dejó el salón tras conocerse los resultados.
Al menos 120 millones de personas habrían votado para elegir al presidente que los gobernará durante los próximos cuatro años, poniendo fin a una campaña centrada en cómo reactivar la economía estadounidense.
Los mismos problemas que acecharon a Obama cuando asumió hace cuatro años siguen presentes al momento de la reelección.
Obama comenzará su segundo mandato acechado por un déficit público que ronda el billón de dólares anual, con una deuda que asciende a 16 billones de dólares y con un Congreso dividido.
Obama siguió el desarrollo de la elección por televisión en su casa en Chicago. Su asesor de campaña David Axelrod dijo por correo electrónico que el mandatario se sentía "genial".
Cada uno de los candidatos ofreció políticas distintas para curar a la alicaída economía estadounidense, con Obama prometiendo elevar los impuestos a los más ricos y Romney ofreciendo recortes de impuestos como una forma de encender una fuerte recuperación económica.
Si bien el proceso de votación pareció transcurrir sin sobresaltos en la mayor parte del país, se registraron algunas quejas aisladas por presuntas irregularidades.
Los residentes de Nueva York y Nueva Jersey, aún golpeados por el paso de la tormenta Sandy, se encontraron con largas colas cuando fueron a votar.
Los republicanos seguramente enfrentarán cuestionamientos sobre su capacidad para apelar a los votantes no blancos teniendo en cuenta que los hispanos, una minoría creciente, se inclinaron mayoritariamente por Obama.
En las elecciones también estuvo en juego la renovación de parte del Congreso. Los republicanos mantuvieron el control de la Cámara de Representantes, mientras que los demócratas retuvieron su estrecha mayoría en el Senado.
Obama, que se convirtió en el 2008 en el primer presidente negro del país, tendría escaso margen político para maniobrar y romper el estancamiento partidista que marcó gran parte de su primer mandato.