FÚTBOL | Vélez quedó eliminado de la Copa Sudamericana al caer como local por 1 a 0 ante Liga Deportiva Universitaria de Quito, en la revancha por una de las semifinales, disputada en Liniers.
El único gol del encuentro lo anotó el delantero Hernán Barcos, sobre los 49 minutos.
De esta manera, el conjunto ecuatoriano -que había ganado por 2 a 0 en la ida- se aseguró un lugar en la final contra el vencedor del choque entre Universidad de Chile y Vasco Da Gama de Brasil.
La derrota en Quito obligaba a Vélez a ganar por más de dos goles para clasificarse, y por eso presionó desde el principio en busca del gol que abriera el encuentro.
Sin embargo, y más allá de su dominio territorial, el equipo de Liniers se encontró con la férrea defensa de Liga Deportiva Universitaria, que supo aguantar el embate inicial, y la gran actuación de su arquero, Alexander Domínguez, la figura indiscutida del partido.
Durante los primeros 20 minutos Vélez tuvo tres chances claras: primero con un tiro cruzado de Héctor Canteros, después con un tiro libre del mismo mediocampista y más tarde con un débil remate de Guillermo Franco dentro del área chica, que tapó el arquero Domínguez con gran reacción.
Luego, Vélez se diluyó y Liga Deportiva Universitaria empezó a salir de su encierro gracias al buen manejo de Ezequiel González, quien, al igual que en Ecuador, formó una dupla temible con Barcos.
Precisamente, un encuentro entre ambos sobre el final de la parte inicial terminó con un cabezazo de Barcos que se fue junto al palo izquierdo de Marcelo Barovero.
En la segunda parte se esperaba otro aluvión de Vélez, pero Liga Deportiva Universitaria sorprendió ya que se puso en ventaja con un gol de Barcos a los 4 minutos.
El atacante recibió un centro desde la derecha y, rodeado por tres hombres, se acomodó para vencer a Barovero con una media vuelta implacable.
A partir de ahí todo se hizo cuesta arriba para Vélez, que necesitaba tres goles para forzar una definición por penales.
El equipo local buscó como pudo, pero no estuvo preciso con la pelota, y ni siquiera el ingreso de David Ramírez le dio claridad al juego.
Cerca del final, el recién ingresado Enrique Gámez Quintero desperdició una chance increíble, solo frente a Barovero, y en la réplica, Domínguez le sacó un cabezazo de gol a Fabián Cubero y otro a Ezequiel Rescaldani.