Sobre el final, River alcanzó a Arsenal en la punta

El primer tiempo no fue vistoso ni bien jugado. Las imprecisiones por parte de ambos equipos dominaron el escenario y constituyeron un espectáculo aburrido y deslucido durante los primeros cuarenta y cinco minutos. En River apareció muy poco Fernando Belluschi, el conductor del equipo del ‘Kaiser’, y en consecuencia, el funcionamiento colectivo de los ‘millonarios’ fue irregular, aunque le alcanzó para sorprender a un rival que tampoco mostró demasiadas virtudes y que apenas inquietó al arquero de la ‘Banda’, Juan Pablo Carrizo. Hubiera sido un empate sin goles sellado, excepto por aquella aparición por la izquierda de Ferrari, a los 21 minutos, cuando el lateral enganchó desde ese sector hacia el medio y, entrando al área de Arsenal, sacó un remate bajo y cruzado, que superó a Cuenca y estableció el 1-0. No hubo mucho más para destacar de ese primer período. La voluntad del ‘Tecla’ Farías, el goleador de River, fue acaso el único punto alto de un encuentro que se caracterizó por la imprecisión y el desorden, en el manejo de la pelota, y por la carencia de ideas y de emociones, en la generación de las situaciones de peligro. En el segundo tiempo, River salió decidido a ampliar la ventaja. Tuvo una clara chance a los 4 minutos, con un remate de zurda de Belluschi, que el arquero Cuenca alcanzó a desviar al córner, con esfuerzo. Poco le duró el dominio a los dirigidos por Passarella, porque a los 10 minutos, Ezequiel Llama ensayó una gran jugada individual por la izquierda, enganchó hacia el centro, se sacó un defensor de encima y remató cruzado para poner el 1-1. Volvió a la carga River, que contó con dos claras oportunidades: Farías lo tuvo primero, pero se lo tapó con gran presencia el arquero visitante y luego Zapata, con un disparo por encima del travesaño, a la salida del área, se quedó con las ganas de festejar. Todas las emociones que escasearon en el primer período, llegaron en el complemento. Arsenal planteó el encuentro de contragolpe, ante un equipo local desesperado por alcanzar el triunfo. Entonces, le sobraron los espacios a los dirigidos por Alfaro para sorprender con sus contraofensivas, pero les faltó justeza para definirlas. Por eso, volvió a sufrir sobre la media hora, cuando Belluschi probó con su buena pegada desde afuera del área, exhibiendo una de sus mejores cualidades, y la pelota salió apenas por encima del ángulo derecho. Tres minutos más tarde, Farías ingresó al área y pateó, pero otra vez rechazó Cuenca, a esa altura, la gran figura de la cancha. Nuevamente se lució el guardavallas a los 42 minutos, luego de un centro desde la izquierda del juvenil Andrés Díaz, que Belluschi peinó con su cabeza, de emboquillada, por encima del cuerpo del arquero, que igualmente reaccionó y con una gran volada, sacó por encima del travesaño. Un minuto después, Galván quedó sólo por la derecha, adentro del área, aunque con un ángulo muy cerrado para su disparo, que salió cerca del primer palo. Sobre la hora, el mismo jugador desbordó y sacó un centro que dejó sólo a Belluschi, éste la dominó con el pecho y cuando remató -casi desde adentro del área menor- volvió a tapar Cuenca. Tanto fue River contra la resistencia del arquero, que al final la rompió. En tiempo de descuento, Ferrari habilitó a Belluschi, que esta vez pudo definir ante la salida del arquero y desató el delirio en el banco y en las tribunas ‘millonarias’. Sin jugar bien, pero con un premio a la tenacidad en su búsqueda ofensiva, River Plate se quedó con un gran triunfo, dejó sin invicto a Arsenal y lo alcanzó nuevamente en las posiciones, ambos con 12 puntos. Aunque ahora miran desde abajo el liderazgo de San Lorenzo. Fuente: Telam.