Sábado 6 de Octubre de 2012, 21:12

San Lorenzo y Arsenal empataron sin abrir el marcador

FÚTBOL | El Ciclón no pasó del 0-0 ante un Arsenal que venía de cuatro derrotas seguidas y cayó en zona de descenso.

San Lorenzo, que llegaba con tres derrotas consecutivas, no pasó del empate sin goles ante Arsenal en el Nuevo Gasómetro, ante un público que le reclamó con vehemencia al director técnico Ricardo Caruso Lombardi por la mala campaña en las diez primeras fechas del torneo Inicial. "Che Caruso, che Caruso, te queremos avisar, este equipo es San Lorenzo y tenemos que atacar", cantó el público en el epílogo del partido, que extendió a cuatro la racha sin triunfos. Después del cachetazo sufrido ante Racing en Avellaneda, San Lorenzo mejoró su actitud pero repitió un funcionamiento lejano al pretendido por la dirigencia y los hinchas. Si bien mereció ganarle al último campeón, que arrastraba cuatro caídas en fila, tuvo muy poca claridad para la gestación y derrochó las pocas situaciones claras que dispuso, la mayoría provocadas por centros desesperados. El local asumió el protagonismo desde el inicio pero sus ataques fueron siempre previsibles para una defensa rival bien ordenada. Por eso, la ocasión más clara del primer tiempo la tuvo Arsenal a los 16 minutos cuando Milton Céliz estrelló un pelotazo en el ángulo superior izquierdo del arco de Pablo Migliore. En ese lapso, la visita contenía sin problemas los avances "azulgranas" y progresaba por el sector derecho con Juan Pablo Caffa, que reemplazó al lesionado Diego Torres a los 10 minutos. Un disparo de Alan Ruiz desde afuera del área, que pasó cerca del travesaño, fue la única chance concreta del primer tiempo para un San Lorenzo impetuoso y confuso. También hubo un claro penal de Diego Braghieri sobre Stracquarlursi pero Pablo Lunati lo ignoró. En el complemento, Arsenal decidió el retraso de sus líneas y le brindó al rival facilidades para monopolizar la pelota y el terreno en pos del necesitado triunfo. Pudo llegar a los 10 con un cabezazo de Denis Stracqualursi pero Lisandro López despejó la pelota en la línea de gol. Condicionados por los nervios, nublados por la ansiedad, los jugadores de Caruso Lombardi repitieron errores en la construcción de cada ataque. Con el ingreso del lungo Julio Furch como tercer delantero, el centro al área de Cristian Campestrini se acentuó como recurso ofensivo pero jamás fue productivo. Stracqualursi otra vez, Enzo Kalinski y el propio Furch dilapidaron las últimas posibilidades de marcar el gol, esquivo para San Lorenzo en este torneo (tiene 6 y si mañana convierte Independiente quedará como el equipo con menos a favor). Entonces, el desencanto primero, la frustración después y el reclamo, por último, dominaron la escena gris en el Nuevo Gasómetro. Fuente: Télam.