FÚTBOL | River Plate venció este sábado a Racing por 3 a 0 en un partido que se disputó en Avellaneda y fue válido por la 18º fecha del torneo Clausura. El equipo de Cappa, que finalizó con diez jugadores por expulsión de Almeyda, por primera vez sumóo dos victorias consecutivas.
Los goles fueron marcados por Rogelio Funes Mori, quien fue la figura del encuentro, a los 2, 16 y 23 del primer tiempo.
El partido empezó sin darle respiro ni a los jugadores de uno y otro equipo, ni al público, ya que cuando habían transcurrido apenas dos minutos de juego el delantero de River Rogelio Funes Mori conectó un centro desde la derecha de Affranchino y puso el partido 1 a 0.
Dos minutos más tarde, Claudio Bieler tuvo la primera de sus claras chances de gol, pero, como en todas ellas, el arquero millonario, Daniel Vega, impidió que los de Miguel Angel Russo pudieran marcar.
De entrada el partido fue electrizante y con situaciones en los dos arcos, pero la contundencia de River fue lo que distinguió a ambos equipos. Los de Angel Cappa tuvieron la llave del partido tanto en la sociedad que formaron Ariel Ortega y Mauro Díaz como en las letales apariciones de su número nueve, único delantero definido en el “Millonario”.
Luego de que Bieler y Cahais desperdiciaran sendas oportunidades, el joven artillero de River facturó dos veces más, a los 16 y 23. A partir de allí, Racing perdió peso en ataque y ganó tanto en fragilidad defensiva como en dudas en todos los aspectos del juego.
El segundo tiempo mostró a un River tranquilo y sin apuros por generar más peligro en el área adversaria, mientras que Racing continuó siendo pura impotencia e imprecisiones.
Los acercamientos al arco de Vega fueron tibios y, mayormente, mediante remates desde media distancia, ninguno con mayor riesgo.
Recién a los 25, Mercado sacó un centro desde la derecha que cabeceó hacia el centro del área Bieler y Hauche desvió, también con un cabezazo. A los 33, el recién ingresado Lucas Licht, quien volvió a jugar tras noventa días, disparó desde afuera del área, pero Vega volvió a controlar sin problemas.
La mancha negra en la actuación millonaria fue la expulsión de Matías Almeyda, por doble amonestación, producto de dos faltas.
El encuentro, durante el resto de los segundos 45 minutos fue parejo y casi intrascendente, con un River que reguló el partido y quitó el pie del acelerador y un Racing que chocó permanentemente contra sus propias limitaciones.
Fuente: Télam.