Fútbol | Tuvo su alegría de fin de año y gritó bicampeón de la Copa Argentina al derrotar a Atlético Tucumán por 2-1
River Plate se coronó anoche bicampeón de la Copa Argentina luego de vencer 2-1 a Atlético Tucumán, en un partido de emociones cambiantes y angustias varias. El inicio dio una muestra de como fue el año del Millonario.
Arrancó lleno de buenas señales: toque corto, circulación de balón, presión alta y protagonismo. Enfrente, Atlético Tucumán lo dejaba llegar hasta mitad de cancha, donde iniciaba una presión que iba metiendo a los de Gallardo en un embudo.
El cabezazo de Nacho Scocco parecía mostrar un cierre de año más acorde a las expectativas de los hinchas, pero un minuto después la Pulga Rodríguez arrastró viejos fantasmas a la cita y River se volvió más parecido al de estos últimos tiempos.
El "Decano" comenzó a atacarlo y lo expuso como un equipo endeble desde lo defensivo. Pudo aumentar el conjunto tucumano pero falló en la definición y el juego siguió abierto. Lo que nadie puede discutirle a este River de Marcelo Gallardo es el enorme potencial individual con que cuenta en la zona de volantes.
Allí parecía estar la única esperanza para cerrar el año con un título y Nacho Fernández marcó el camino. Golazo del ex Gimnasia LP apenas arrancado el complemento para recuperar confianza y trasladar inquietudes al otro bando. Scocco prometía armar un golazo y la tiraba por arriba de cara a Sánchez.
River Plate volvía a creer y el Decano ya no resultaba un rival tan incómodo. Su imagen distaba de aquella de la primera mitad y todo era mas forzado para los de Zielinsky, aún cuando la Pulga Rodríguez volvía a exponer a Maidana y definía apenas alto por encima de Bologna.
A esa altura el equipo de Núñez mostraba mejores argumentos y los cambios del Muñeco le potenciaban virtudes, mientras Maidana sacudía el palo de Sánchez con un testazo.
La final tenía color rojo y blanco. Los tucumanos no encontraban la forma de ponerse de cara a Bologna y el tiempo empezaba a jugar su partido. Se sabe, el apuro es hermano de las imprecisiones y Atlético Tucumán lo adoptó en esa búsqueda de igualar.
Así el equipo de Marcelo Gallardo le fue poniendo punto final al Sueño de la Copa Argentina, uno de los objetivos trazados a principios de años. Esta defensa del título por River, lo logra por el valor de sus individualidades.
Una Copa más para las vitrinas del club de Núñez, un título que se festeja con el corazón y con sed de revancha. Tras un mes de noviembre doloroso, River Plate, cerró el año deportivo con una leve sonrisa entre tantos malos ratos.
Ahora, a disfrutar. Dentro de unos días, trazar los objetivos 2018. Próximo desafío: Supercopa 2018. Rival: Boca.