| La Academia sufrió y no jugó bien. Ya sin Merlo, comenzó ganando, pasó a perder y finalmente igualó. Los goles los hicieron Bergessio (2) y Pellerano. Para los visitantes anotaron Ríos, Yllana y Mansanelli. Insultos para el plantel y para De Tomasso.
El primer tiempo fue como un cuento de terror para Racing. Sin Reinaldo Merlo en el banco, tras su despido del viernes, y con los insultos de los hinchas contra los jugadores y contra el gerenciador del club, Fernando De Tomasso, la "Academia" se fue al descanso perdiendo 2-1.
Los cordobeses fueron ampliamente superiores, con una gran tarea de su único delantero, Andrés Ríos, y de sus mediocampistas -Yllana, Bollatti y Matías Suárez- que, por momentos, le dieron un "baile" futbolístico al ex equipo de Merlo.
Claro que la explicación para semejante actuación en falso de la "Academia" no es sólo futbolística, sino que más bien las respuestas deben encararse por el lado del factor anímico.
El gol convertido por Bergessio, a los 21 minutos del primer tiempo, apenas sirvió para potenciar los silbidos y los insultos. Porque en la jugada inmediatamente siguiente, Andrés Ríos empató con un fuerte remate al centro del arco y desde las tribunas ya no se aguantó tanta bronca contenida.
"Jugadores, a ver si ponen h…, no le ganan a nadie", comenzaron a gritar los hinchas, desde todos los sectores del estadio. E inmediatamente cargaron contra el gerenciador del club, Fernando De Tomasso, a quien le exigieron con sus cánticos que debía renunciar.
La explosión llegó con el segundo tanto de Belgrano: a los 38 minutos, se durmieron los defensores de Racing, a la salida de un tiro libre y aprovechó la situación Andrés Yllana, quien se metió dentro del área -sólo, sin marcas, casi como quien pasea por un shopping- y definió con mucha clase, "picando" la pelota por encima del cuerpo del arquero Romero.
"La camiseta de Racing, se tiene que transpirar, y sino no se la pongan, váyanse no roben más…", se hicieron oír los hinchas, antes del final del primer tiempo.
En el arranque del segundo, llegó otro golpe, casi de nocaut, contra los locales: a los 6 minutos, Mansanelli probó desde lejos y clavó su disparo en el fondo del arco. Un golazo desde 30 metros que estableció el 3-1 y potenció los insultos.
Pero resurgió la "Academia" de entre sus cenizas. El ingresado Pellerano anotó a dos minutos de haber pisado el campo de juego y luego apareció Bergessio, el jugador más destacable del equipo local, para igualar 3-3.
Pero ni siquiera esa remontada impidió que los hinchas despidieran a su equipo con silbidos, insultos y un pedido con tono de exigencia: "Que el domingo, cueste lo que cueste, el domingo tenemos que ganar…". El próximo domingo, Racing visitará a Boca en La Bombonera.
Fuente: Télam.