FÚTBOL | Boca Juniors sufrió la expulsión de Silva y fue goleado por Quilmes 3 a 0 en el estadio Centenario. Cauteruccio, dos veces, y Garnier anotaron los goles. El “xeneize” terminó así una semana de terror.
Boca Juniors sufrió la expulsión de Silva y fue goleado por Quilmes 3 a 0 en el estadio Centenario. Cauteruccio, dos veces, y Garnier anotaron los goles. El “xeneize” terminó así una semana de terror.
El equipo de Julio César Falcioni empezó mejor que su rival, tuvo dos chances de gol a través de Lucas Viatri y Matías Caruzzo, pero en la primera réplica, Quilmes, recientemente ascendido de la B Nacional, abrió el marcador.
A los 11 minutos, Cauteruccio aprovechó un grave error de Caruzzo y de derecha puso la pelota junto al palo izquierdo del debutante Oscar Ustari.
El gol marcó la diferencia. Es que Quilmes, pese a tener menos la pelota, manejó el desarrollo del juego, superó a Boca y hasta contó con situaciones para ampliar la ventaja por intermedio de Facundo Diz y el propio Cauteruccio.
El equipo de Falcioni no tuvo volumen de juego, careció de ideas para llegar al arco de Emanuel Trípodi y se diluyó en su propia impotencia.
Sin dudas, sintió la ausencia de un generador de fútbol, que tiene nombre propio: Juan Román Riquelme, quien dejó el club tras la final de la Copa Libertadores, que quedó en manos de Corinthians de Brasil.
Encima, sobre lo 18 minutos, se quedó con diez jugadores por la ingenua expulsión del uruguayo Silva, quien agredió a Sebastián Romero.
Pese a eso, sobre el final de la etapa inicial, Clemente Rodríguez remató de larga distancia y casi empata, con complicidad de Trípodi.
Pero hubiese sido una injusticia, ya que Quilmes fue superior, a partir de la solidez en el fondo, la presión en la mitad de la cancha y la profundidad en ataque.
Y esa superioridad se plasmó en la red recién en el comienzo del segundo tiempo.
Primero avisó Caneo, a los 12 minutos, y lo concretó Garnier, 180 segundos más tarde, tras una excelente jugada colectiva que inició Cauteruccio, la continuó Caneo, la dejó pasar Diz y la definió el volante platinado.
El 2-0 se ajustó un poco más a la realidad, a lo que se vio en la cancha a partir de la impotencia de uno, Boca, por llegar a la igualdad; y el juego colectivo de otro, Quilmes, para sellar el resultado.
Si bien los cambios que realizó Falcioni: Orlando Gaona Lugo por Pablo Ledesma y Cristian Alvarez por Cristian Chávez, le dieron más fútbol al equipo, llegaron tarde.
Y sobre el final, para dejar en claro el presente de uno y otro equipo, Cauteruccio, la figura de la cancha, anotó el 3 a 0.
Así, después de 8 años, Quilmes volvió a ganarle a Boca de local.
Fuente: Télam.