Viernes 3 de Junio de 2011, 09:33

Peñarol jugará la final de la Copa Libertadores

FÚTBOL | Vélez se impuso por 2-1, pero el equipo uruguayo se metió en la final por el gol de visitante. Silva tuvo la clasificación en un penal que tiró por arriba. Santos espera al Carbonero.

Se terminó el sueño de Vélez en la Copa Libertadores de América. El equipo argentino se impuso como local por 2-1, pero la victoria no le alcanzó debido a que Peñarol avanzó a la final gracias al gol que consiguió esta noche en Liniers (la ida fue 1-0). Santos será el rival del Carbonero en la definición. Pese a contar con futbolistas de experiencia y jugar juntos desde hace mucho tiempo, Vélez no le pudo escapar al nerviosismo en el arranque del partido. De entrada, Marcelo Barovero se quedó con un mano a mano ante Alejandro Cauteruccio, Peñarol lastimaba por el sector izquierdo de su ataque y complicaba con la potencia de sus delanteros. Fabián Cubero tuvo que dejar la cancha antes del cuarto de hora por una lesión muscular y en su lugar Ricardo Gareca decidió el ingreso de un lateral: Fernando Tobio. Martinuccio volvió a estar cerca con un cabezazo, el local no encontraba su habitual funcionamiento en ataque y recién a los 23m tuvo la primera jugada clara para abrir el marcador: desbordó Augusto Fernández, la bajó Santiago Silva de cabeza y el gol de Juan Manuel Martínez lo evitó Guillermo Rodríguez con un cruce bárbaro. El Fortín creció con el paso de los minutos y empezó a mover la pelota a lo largo del campo para encontrar los espacios. Silva estuvo cerca con un zurdazo que se desvió en Guillermo Rodríguez. Era el mejor momento de los de Liniers, pero fue Peñarol el que convirtió: a los 33m, falló Fernando Ortiz, Martinuccio armó una gran jugada y la definió Matías Mier. Inmediatamente, Barovero salvó el segundo tras un cabezazo de Juan Manuel Olivera. En el cierre de la etapa inicial, Vélez fue con todo a buscar el empate y lo encontró. Avisó en un par de oportunidades por Silva y Sebastián Domínguez, se lo anularon mal por una inexistente posición adelantada del Burrito Martínez y cuando ya se jugaban los 46m, en el último centro, apareció Tobio para empujar el balón luego de uno de los tantos rebotes que dio el arquero Sebastián Sosa. Como se especulaba, Vélez fue a buscar el segundo desde el arranque del complemento y la primera clara que tuvo fue con un cabezazo de Ortiz. Peñarol defendía muy atrás, pero en cuanto pudo sacó la contra y fue Martinuccio quien estuvo en un par de oportunidades merodeando el gol. Gareca buscó en Ricardo Alvarez desequilibrio y en el cuarto de hora se terminó el partido para un Maxiliano Moralez que no jugó en óptimas condiciones (Vélez lo sintió). Silva y Héctor Canteros probaron a un Sosa que nunca se mostró seguro y, a los 21m, Olivera se perdió un gol increíble luego de otra corrida de Martinuccio. Y cuánto lo lamentó la visita… Treinta segundo más tarde, Martínez se la bajó a Silva y el otro nueve no perdonó. Un gol separaba al Fortín de la final y Ortiz (no fue su mejor noche), con una infantil falta (ya tenía amarilla), se fue expulsado y se encargó de hacerle más complicada la tarea a su equipo. Sin embargo, Peñarol también hacía cosas para ayudar al rival y, a los 29m, Darío Rodríguez le regaló un penal: primero salió mal y después le hizo falta a Martínez. Del remate se encargó Silva, quien se resbaló al llegar a la pelota y lo tiró por arriba. La diferencia numérica no se notaba, es más, parecía que eran los uruguayos los que jugaban con un menos ya que resignaron a acumular gente cerca de su área y sacarla lo más lejos posible. Vélez, agotado, fue hasta el final. No le alcanzó…