Newell´s perdió pero avanzó de ronda en la Sudamer

El equipo rojinegro llegaba a Bolivia con un colchón más que cómodo de seis goles del partido de ida, por lo que casi ni se inmutó en todo el partido. Los rosarinos sólo tuvieron que desconectar la creación de los orureños para no sufrir en demasía en los 3.706 metros de altitud sobre el nivel del mar del estadio Jesús Bermúdez. Su técnico, Roberto Sensini, no quiso dar ninguna opción a la sorpresa y alineó a un equipo de garantías. La premisa era clara: orden táctico en defensa y remates de media distancia, por eso de la incontrolable altura, en ataque. Dominó todo el partido el conjunto local, obligado a anotar siete goles para pasar de ronda, un milagro que no se produjo a pesar de la fe que le puso encima del terreno de juego y del constante apoyo de su afición. Llegaba sin peligro y sin orden San José al arco de Sebastián Peratta, y las pocas veces que lo hizo el portero lo solventó sin problemas. A los 20 minutos, una serie de rebotes y carambolas dejaron solo al central boliviano Luis Méndez para que depositara el balón en el fondo de las mallas, y con ello despertó a su equipo. Sensini, a pesar de ello, pedía calma a sus jugadores desde la banda, que todavía gozaban de una ventaja suficiente para no sufrir. San José se animó con el gol, y tuvo dos opciones clarísimas para incrementar el marcador. Aprovechando que Newell's se empezaba a quedar sin aire, Alejandro Bejarano lanzó una falta que superó por milímetros el travesaño, y el paraguayo Aquilino Villalba tuvo la más clara en un remate que salió lamiendo el poste izquierdo de los argentinos. Poco más hizo San José para sumar goles a su saco. La mejor la tuvo el brasileño Regis da Souza, ya en el segundo tiempo, cuando incomprensiblemente lanzó fuera un balón que sólo tenía que empujar. Para no complicar una clasificación sentenciada, Sensini dio entrada a uno de sus mejores hombres, el volante Mauricio Sperdutti, para quitar todo tipo de ilusión a los bolivianos, que con las sustituciones extremadamente ofensivas no cambió la cara, y hasta la empeoró. Los despropósitos de los bolivianos en ataque fueron tan constantes que ni Newell's tuvo que moverse para defenderse. Y, en las que tuvo que hacerlo, apareció la figura de un Peratta insuperable. Sólo falló el arquero ante un cabezazo de Villalba, que anotó el segundo de los 'santos' a falta de diez minutos para la conclusión. La eliminación de San José dejó a Bolivia sin representante en la Copa Sudamericana, después de que el miércoles cayera eliminado Universitario de Sucre frente al Palmeiras brasileño. Newell's, por su parte, se fue de Oruro con la misma tranquilidad con la que llegó y pensando en su próximo rival, el actual campeón Liga de Quito de Ecuador.