Sábado 14 de Febrero de 2009, 00:07

Huracán goleó a Racing

FÚTBOL | En Avellaneda, el equipo de Angel Cappa se floreó y ganó 4 a 1. Matías Martínez puso en ventaja al local, pero el "Globo" en 17 minutos marcó cuatro goles a través de Matías De Federico (2), Federico Nieto y Javier Pastore, todos en la primera etapa.

Huracán goleó 4 a 1 a Racing, en Avellaneda, marcando todos los tantos en la primera etapa y cuidando el resultado en la parte final, en un partido correspondiente a la segunda fecha del torneo Clausura. Matías Martínez puso en ventaja a Racing, pero Huracán en una ráfaga de buen fútbol marcó 4 goles seguidos señalados por Matías De Federico (2), Federico Nieto y Javier Pastore, todos en el primer tiempo. El partido se jugó en el estadio Presidente Perón, donde hubo una multitud de hinchas de Racing, con un regular arbitraje de Gustavo Bassi. Huracán, con una gran actuación colectiva y con varias figuras, como De Federico, Pastore y Mario Bolatti, entre otros, se floreó ante un Racing perdido, sumido en una confusión general de la que no puede salir. Racing y Huracán salieron a jugar en la cancha de Racing con las mismas intenciones, las de atacar, la de marcar goles y la de ganar el partido. En un comienzo impreciso el que pudo sacar ventaja rápido fue Racing, que se puso en ventaja con un cabezazo de Matías Martínez, quien sin marca mandó la pelota al fondo de la red. Con el gol comenzaron todos los problemas para Racing, cuya confusión general, la misma que transmite su entrenador, Juan Manuel Llop, quien nunca paró el mismo equipo, ni siquiera en las prácticas desde que empezó el año, se notó como nunca en la cancha. El equipo de Angel Cappa, que tiene muy claro a qué juega, nunca se desesperó, siguió intentando con la pelota al pie y tuvo poco más de quince minutos brillantes, para marcar en el primer tiempo cuatro goles, algo que hace rato no consigue el conjunto de Parque Patricios. Primero fue De Federico, apilando gente por la derecha del ataque del "Globo" definió cruzado ante un inmóvil Gustavo Campagnuolo para establecer el 1-1 y luego llegó la catarata. Nieto, de cabeza puso el 2-1, luego apareció otra vez De Federico aprovechando que Campagnuolo después de atajar su primera pelota del partido se quedó tirado en el piso para con un frentazo establecer el 3-1. La frutilla del postre llegó de la mano de Pastore, quien se "burló" de Franco Sosa (juega por artículo 225 por la lesión de Franco Zuculini pese a que Braian Lluy fue titular durante todo el verano) y cuando llegó a estar cara a cara con Campagnulo definió con gran categoría. Era el 4 a 1, que ni el más fanático hincha de Huracán podía haber soñado. La desazón de todo Racing era general, porque el debutante Rubén Ramírez hacía lo que podía, Pablo Lugüercio corría todas y así como las corría las perdía, Juan Carlos Falcón nunca se sintió cómodo siendo "doble cinco" y Lucas Castromán aguantó sólo tres o cuatro minutos el ritmo de primera división, después pagó caro su mal estado físico (lució con un claro exceso de peso). Así, con el 1-4, sin respuestas futbolísticas el equipo de Avellaneda salió a tratar de revertir la historia en el segundo tiempo. Y Llop hizo dos cambios para no cambiar, para perder sólo 4 a 1, porque sacó a Castromán, quien todavía es inexplicable que haya jugado por su mal estado físico, para que entre Leandro González (mismas características) y puso a Gonzalo García por José Shaffer (lateral por lateral). Entonces, Racing siguió jugando igual, con Ramírez y Lugüercio luchando solos contra todos, con un poco de ayuda ahora de Claudio Yacob, pero muy poco como para poder aspirar aunque sea a descontar. Huracán, con un Pastore inspirado, con Mario Bolatti distribuyendo la pelota con criterio en el medio, le alcanzó para dejar pasar el tiempo y buscar alguna contra para aumentar, pero sin desesperarse sabiendo que en el primer tiempo había liquidado la historia. Fuente: Télam.