| Dirigentes del club de Núñez, del Villarreal de España y el padre y representante del delantero, cerraron la incorporación del ex Rosario Central, por quien pagaron u$s2 millones por la mitad del pase
El defensor paraguayo Julio César Cáceres y el delantero del Villarreal de España Luciano Figueroa se convirtieron en los nuevos refuerzos de River para esta temporada.
La entidad de Núñez compró la mitad del pase de Figueroa en u$s2 millones y arregló el contrato del atacante, que en principio sería por 18 meses, luego de solucionar algunas diferencias económicas.
Anoche se reunieron en un importante hotel porteño el presidente del conjunto "millonario", José María Aguilar, junto a los directivos del Departamento de Fútbol Mario Israel y Rodolfo Cuiña, con el consejero deportivo del Villarreal José Manuel Llaneza y Jorge Figueroa, padre y representante del jugador.
Allí llegaron a un acuerdo y sellaron la incorporación del delantero, que en las próximas horas viajará al país para sumarse a River.
Por su parte, Cáceres se realizará hoy la revisación médica correspondiente y luego comenzar a entrenarse con sus nuevos compañeros.
El defensor ya había acordado su desvinculación de Atlético Mineiro de Brasil -el dueño del pase es el Nantes de Francia- y llegará a River a préstamo por seis meses, con una opción de compra.
El conjunto "millonario" ya había sumado como refuerzos al defensor Paulo Ferrari y los mediocampistas Juan Carlos Toja y Lucas Pusineri.
En tanto, hoy será un día clave para la negociación por el delantero Mauro Rosales, ya que la dirigencia del Ajax de Holanda decidirá si acepta transferir al ex jugador de Newell's.
En cambio, la incorporación del mediocampista Andrés D'Alessandro está cada vez más complicada, porque el Wolfsburgo de Alemania se desprenderá del enganche solamente si algún club decide comprarlo.
Además se sumó un nuevo problema porque la esposa de D'Alessandro está embarazada y tiene prohibido viajar en avión, situación que obligaría al jugador a permanecer en Alemania, ya que no vendría a la Argentina sin ella.