Sábado 29 de Septiembre de 2007, 14:00

ESTUDIANTES Y TIGRE EMPATARON

FÚTBOL | Los goles visitantes fueron de Ayala y Blengio. Alayes y Maggiolo anotaron para los locales. El equipo de Cagna estaba jugando un gran encuentro, pero sobre el final aparecieron los tantos salvadores del "Pincha". Más alla de este resultado la campaña de Tigre es muy buena.

Estudiantes y Tigre empataron 2-2, en un partido jugado en el estadio Ciudad de La Plata. Néstor Ayala y Juan Carlos Blengio marcaron los goles que pusieron a los de Victoria 2-0 arriba en el marcador, en la primera etapa, pero en el segundo tiempo, en los minutos finales, Agustín Alayes y Ezequiel Maggiolo dejaron todo como al comienzo. En el comienzo del partido los locales buscaron imponer su jerarquía, con Juan Sebastián Verón volviendo a jugar después de mucho tiempo, y a los dos minutos tuvo su primera chance clara de gol, con un cabezazo de Sebastián Domínguez, que se fue rozando el palo izquierdo defendido por Daniel Islas. Pero Tigre enseguida respondió, con una contra que no pudieron definir dentro del área ninguno de sus delanteros, cuando la pelota estaba picando dentro del área chica. Y de a poco los de Victoria se fueron asentando en el estadio Ciudad de La Plata y si bien los de Diego Simeone manejaban la pelota, cada vez que cruzaban la mitad de cancha en busca de Mariano Andújar generaban peligro, como a los 9 minutos, cuando Sebastián Ereros, después de una “avivada” de Néstor Ayala, estrelló un remate en el travesaño. A partir de ese momento los dirigidos por Diego Cagna se agrandaron y le sacaron a los platenses la pelota y ya la figura de Verón dejó de eclipsar a todos. Entonces no sorprendió a nadie que la visita se ponga en ventaja, con un tanto marcado por el paraguayo Néstor Ayala, quien peinó hacia el arco un excelente tiro libre ejecutado por Matías Giménez. Con el gol recibido Estudiantes se desesperó, empezó a pegar patadas y en dos minutos el árbitro Rafael Furchi debió expulsar a Verón, por un codazo, y a Agustín Alayes, por un patada, pero el juez, de normal mal desempeño, sólo los amonestó. Y Tigre se aprovechó de eso y a los 26 minutos consiguió su segundo gol, marcado por Juan Carlos Blengio, quien aprovechó un serie de rebotes, dentro del área chica, luego de un tiro libre ejecutado por Román Martínez. Si Estudiantes se mostraba como un equipo desconcertado, después del segundo gol de Tigre esto se incrementó y sólo no se fue al descanso perdiendo por otro tanto más porque Andújar sobre el final se anticipó a Ayala, cuando el delantero paraguayo se preparaba para convertir el tercero. En la segunda etapa nada pareció cambiar, porque como en el inicio del partido Estudiantes salió con más decisión, pero sin generar demasiado peligro y con el correr de los minutos, con mucho esfuerzo, los jugadores de Tigre le fueron sacando la pelota, buscando alguna contra letal o sólo para dejar correr los minutos. A poco de iniciado el segundo tiempo Simeone decidió sacar a Verón, de mal partido (estuvo perdido dentro de la cancha), también hizo ingresar a Maggiolo pero nada cambió, porque su equipo careció de ideas para vulnerar a una firme defensa de Tigre. Cuando en el partido no pasaba nada y todos esperaban el final, la cabeza de Agustín Alayes, tras un centro enviado por Leandro Benítez, revivió a Estudiantes, que llegaba al descuento y soñaba con el empate, que no merecía. Pero en el fútbol no se habla de merecimientos y Tigre, que fue más durante los 90 minutos, se durmió sobre el final y Maggiolo cumplió con la “ley del ex” y el partido terminó empatado en dos, cuando el Matador tenía tres puntos asegurados pero que se fue a Victoria con una igualdad con sabor a derrota.