| El equipo de Diego Simeone perdía y con mucha entrega lo dio vuelta. Pero sobre el final Argentinos le empató el partido, que concluyó 2 a 2. El conjunto platense está a tres puntos de Boca y mantiene las esperanzas.
En el estadio Diego Armando Maradona se vivió una tarde emocionante. Pasó de todo. Se retiró el último ídolo de la gente de Argentinos, Jorge “Polo” Quinteros, marcando un gol el día de su despidida del fútbol.
Y Estudiantes perdía 1 a 0, sabía que Boca caía en Córdoba y se fue con todo en búsqueda del empate.
Diego Simeone mandó a la cancha cuatro delanteros, buscó por todos lados, lucho, nunca se dio por vencido y tuvo su premio, más allá de la amargura por empate sobre el final.
Cuando los minutos pasaban, con la bronca de saber que perdía Boca, llegó el gol de Mariano Pavone. Con el empate y la derrota de los dirigidos por La Volpe la esperanza seguía viva.
Pero Estudiantes fue por más, desordenado, sin el fútbol que puede mostrar, pero con mucho amor propio. Y llegó a marcar el segundo gol, con un potente remate dentro del área de Juan Sebastián Verón, a cuatro minutos del final.
Todo era una locura, porque Estudiantes se ponía a punto de Boca y los sueños de campeón podían convertirse en realidad.
Pero el fútbol tiene estas cosas, porque en el último minuto de descuento llegó el gol del empate de Gonzalo Choy González, de cabeza y la tristeza general de todo Estudiantes.
De todos modos, el equipo de Simeone logró postergar una semana los festejos de Boca y si bien los de la ribera con un empate son campeones, no está nada dicho. Los partidos hay que jugarlos y en una semana se sabrá que es lo que pasará.
Fuente: Télam.
