FÚTBOL | El líder del torneo Apertura, Estudiantes de La Plata, jugó a lo campeón y alimentó su sueño de conquistar el certamen con una goleada por 4-0 sobre River Plate, en el estadio Monumental de Núñez, en la continuidad de la 18° y penúltima fecha.
Leandro Desábato y Matías Sánchez, a los 2 y 48 minutos anotaron en el primer tiempo, mientras que Marcos Rojo y Gabriel Mercado, a los 47 y 57, convirtieron los goles del conjunto de Alejandro Sabella.
River jugó casi todo el segundo tiempo con un jugador menos por la expulsión del defensor Jonatan Maidana al minuto de esa etapa por doble amonestación.
Estudiantes suma 42 unidades y puede coronarse campeón el domingo en la cancha de Quilmes si vence a Arsenal o si Vélez, su escolta a dos puntos, no le gana a Racing en Avellaneda.
La última goleada de los platenses en el Monumental había sido en el Clausura `97, cuando se impuso por 4-1, con dos goles de Martín Palermo, Leonardo Ramos y Martín Fúriga, mientras que Marcelo Escudero descontó para River.
El comienzo del juego fue a pedir de Estudiantes, ya que a los dos minutos ganaba por 1-0 con un cabezazo de Leandro Desábato y poco antes había estrellado un remate en el palo derecho por intermedio de Gastón Fernández.
A partir de la conquista, la visita ejerció mucha presión en la mitad de la cancha, neutralizó a los volantes locales y manejó la pelota con criterio utilizando todo el ancho del terreno de juego.
Si bien es cierto que River pudo haber empatado a los 10 minutos con un tiro libre de Erik Lamela que pegó en el palo izquierdo del arco defendido por Agustín Orión, también es cierto que Estudiantes fue más claro a la hora de elaborar maniobras pese a no contar con dos figuras importantes como Juan Sebastián Verón y Enzo Pérez, ambos suspendidos.
El local, mientras tanto, mostró deficiencias en la última línea, sobre todo en las pelotas cruzadas, careció de un conductor en la zona media pese los intentos de Lamela y, adelante, Rogelio Funes Mori y Mariano Pavone fueron neutralizados permanentemente por los defensores de la visita.
El mejor rendimiento Estudiantes, en la que sobresalieron Leandro Benítez (su pegada en los tiros libres fue clave), la entrega de Rodrigo Braña y la solidaridad del resto, tuvo su premio en el tercer minuto de adicional cuando Matías Sánchez anotó el segundo gol, después de un despeje del mediocampista y posterior centro hacia atrás de Maximiliano Núñez.
El arranque del período final tampoco pudo ser mejor para Estudiantes, ya que River sufrió la expulsión de Maidana y de esa jugada anotó el tercer gol, ahora a través de Marcos Rojo, después de un nuevo tiro libre de Benítez que Gabriel Mercado bajó de cabeza para que su compañero definiera de zurda.
Este tanto fue una "puñalada en el corazón" de River, que nunca pudo contrarrestar la mayor jerarquía del conjunto platense. Por eso no extrañó que la visita aumentara la diferencia a los 57 minutos con otro cabezazo, esta vez del ex Racing Mercado, tras un tiro libre de Benítez con su zurda mágica.
Los hinchas de Estudiantes no paraban de festejar en la tribuna Centenario alta, la más cercana a la avenida Figueroa Alcorta, la exhibición que su equipo brindaba en el campo de juego ante un River entregado y falto de reacción para revertir la situación.
Los minutos restantes transcurrieron entre los tibios embates del local en búsqueda del descuento y el orden, prolijidad y criterioso manejo de la pelota de Estudiantes, que la hizo circular por todo el ancho de la cancha.
El conjunto de Sabella cumplió con lo suyo, goleó en el Monumental jugando muy bien, mantuvo la diferencia de dos puntos sobre su escolta Vélez Sarsfield y quedó a un paso de un nuevo título, que obtendrá si le gana el domingo a Arsenal en la cancha de Quilmes o los de Liniers no vencen a Racing en Avellaneda.